Revista Libros
Una adolescente perdida en los pliegues del pasado resume en su desoladora peripecia vital el sufrimiento de toda una época: el continente europeo en la era hitleriana, visto desde la perspectiva actual, y la aventura moral del escritor que trata de recobrar la verdad de aquel tlempo y aquellos seres.
El 31 de diciembre de 1941, en el periódico Paris-Soir apareció un anuncio patético: unos padres trataban de encontrar a su hija, de 15 años, que se había fugado de un colegio de monjas. Nueve meses más tarde, el nombre de la muchacha aparece en una lista de deportados al campo de exterminio de Auschwitz. Al filo de estas dos desapariciones sucesivas conocemos el destino de todo un pueblo, de toda Francia y de toda Europa, en una era de dolor, de humillaciones y de violencia, en la que la pureza resalta por contraste sobre un fondo de destrucción. Pero el tema del libro no es sólo la vida de Dora Bruder, sino la búsqueda del propio autor que trata de reconstruir aquella biografia borrada.
«Un libro turbador» (Renaud Matignon, Le Figaro).
«Un libro contra el olvido» (Norbert Czarny, La Quinzaine Littéraire).
«Un gran libro» (Marc Lambron, Le Point). «Un libro excepcional» (Jorge Semprún, Le Journal du Dimanche).
La dolorosa búsqueda de un ayer lacerado nos muestra, trasparentándose en contraluz desde el presente, el dolor, el horror y el sufrimiento del pasado, y también su poesía, más heridora por más sofrenada y sofocada tras la contención expresiva del autor.
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