Si no sabéis en que aprovechar los días de este fin de semana os tengo una recomendación que como cinéfilos seguro os va a convencer. Des de ayer jueves 21 de agosto hasta el domingo 24, se celebra en el norte de Cataluña, concretamente en Tremp (Pallars Jussà), la tercera edición de la joven muestra de cine rural Mostrep. El festival, que se centra en acercarse al entorno rural a través del cine, inaugura este año con una selección de los mejores cortometrajes de este subgénero, que se han producido estos últimos años en el país vasco, conjunto de cintas elegidas por el cineasta, profesor de cine y director del festival Cortada de Vitoria-Gasteiz: Kepa Sojo. Hasta el domingo podrán verse varios de los cortometrajes finalistas, para el domingo conocer los ganadores de la muestra, ofreciendo durante el resto de la programación una gran variedad de propuestas que van desde conciertos de Jazz, talleres, humor, proyección de cortos locales, animación… y muchas otras propuestas que podéis consultar entrando en la programación. ¿Qué mejor manera que aprovechar un fin de semana visitando nuevos lugares, tan en contacto con la naturaleza, y de pasada complementarlo con festival de cine?
Aprovechando el inicio del festival, comento hoy una cinta de Marc Recha, cineasta de nuestras fronteras que siempre ha sabido retratar muy bien el entorno rural en sus películas. El filme es Pau i el seu germà (Pau y su hermano), tercera película del cineasta, que gracias a su nominación a la Palma de Oro en Cannes, logró un mayor reconocimiento internacional.
Pau y su madre hace un año que no tienen noticias de su hermano Àlex, hasta que una llamada telefónica les notifica su muerte. Para conocer que ha sido de él durante todo este tiempo, deciden visitar el pueblo del Pirineo dónde les dicen que ha estado viviendo, acercándose así un poco más a un hermano y un hijo, al cual parece, ya no conocían.
Recha sigue intentando acercarse una vez más a la veracidad a través de las imágenes, como ya hizo con su anterior L'arbre de les cireres (El árbol de las cerezas) (1998). Esta vez el director catalán abandona el trípode para echar uso de la cámara en mano, un formato que como algunos movimientos cinematográficos han relacionado con la naturalidad y el acercamiento a una mirada objetiva, a pesar que, paradójicamente, también logra que el espectador se de cuenta de la presencia de la mirada exterior a través de la cámara, dando lugar al evidente ficcionado del filme.
Lo que no abandona es el estilo en que logra convertir un simple lugar, un paisaje, en un personaje más de su película. Es evidente que la localización rural es imprescindible para entender bien la filmografía de Recha, especialmente en este filme, dónde el viaje hasta una zona apartada de las grandes urbes, con un estilo de vida tan marcado, es la que se encarga de conducir a los personajes en el propio viaje interior.
Un doble viaje que emprenden Pau y su madre, por un lado físico, hasta el lugar dónde vivió su último año Àlex, por el otro el de evolución personal, que cada uno vive individualmente a lo largo del filme. Y esto se extrapola al resto de protagonistas de la película, cada uno de ellos afectado de un modo u otro por la muerte de Àlex que, vivida en ese entorno, logra un avance (o retroceso) sobre su carácter y sus acciones. Así el director aprovecha para reflexionar sobre la muerte, sobre la herencia emocional que deja la perdida de un ser querido, y sobre como la conexión social afecta de un modo muy claro a las personas. Queda claro con el avance del filme que esa evolución no se pierde al huir de ese entorno catalizador, es algo que crea poso, y sigue a los personajes aunque intenten refugiarse en la gran ciudad.
El director tiene muy claro que el cine debe ser evolutivo para lograr transmitir sus ideas, por eso a pesar de contar con un guión preestablecido, se deja guiar por las intuiciones del momento, y las emociones de sus actores, que se nota como logran interiorizar sus personajes, hasta el punto de convertirse en ellos mismos, y dejar así que la historia fluya por si misma. Si un actor, como podemos ver en el filme, sufre un accidente y se rompe un tobillo, no supone un problema para la película, ya que es el propio personaje el que ha sido victima del accidente, y por lo tanto, es integrado con naturalidad en el filme. Así, el viaje que sufren las cenizas del fallecido Àlex son un claro ejemplo en síntesis de esa idea, convertida en un ejemplo que además ayuda a dar más veracidad a la historia.
Existe algo en Pau i el seu germà que puede logran el no encuentro con el espectador. A pesar de una historia con su propia intriga -¿qué llevó a Àlex al suicidio?- en ningún momento el filme busca dar respuestas ni crear una historia clásica alrededor de la reconstrucción de unos echos, la película se centra más en la evolución personal y del entorno, por lo que no se configura un relato en si, y eso a la larga puede hacer (y lo logra) que el espectador deje de tener motivos para continuar con su visionado. Es por eso que la película de Recha hay que tomársela como un modo de experimentar con el cine como herramienta expresiva, ya que de este modo podemos convencernos que Pau i el seu germà es una película de lo más interesante.
================================================================TÍTULO ORIGINAL Pau i el seu germà (Pau y su hermano) AÑO 2001 DURACIÓN 107 min. PAÍS España. Francia IDIOMAS Catalán. Francés. Español DIRECCIÓN Marc Recha GUIÓN Marc Recha, Joaquim Jordà MÚSICA Aitor Millán Fernández, Xavi Turull, Fred Vilmar, Toni Xuclà FOTOGRAFÍA Hélène Louvart REPARTO David Selvas, Nathalie Boutefeu, Marieta Orozco, Alicia Orozco, Luis Hostalot, Juan Márquez, David Recha PRODUCTORA Oberon Cinematografica / JBA Production
GÉNERO DramaTEMÁTICA Vida rural. Muerte/Duelo. Naturaleza
SINOPSISÀlex es un joven que trabajaba en el puerto de Barcelona, pero un día, cansado de su vida rutinaria, decidió dejarlo todo e irse a vivir lejos de la ciudad, a un pequeño pueblo del Pirineo catalán. Pasó el tiempo y su familia comenzaba a preocuparse por la falta de noticias sobre él, hasta que les llega la noticia de que se ha suicidado. Su hermano Pau y su madre Mercè viajan al pueblo donde Àlex vivió los últimos meses para conocer los detalles y los motivos de su suicidio. Allí conocen a Sara, su novia que, sin saber que Àlex ha muerto, sigue esperando que vaya a buscarla para ir a vivir juntos a la ciudad; a su amigo y jefe, Emili, que hace años también decidió cambiar de vida y dejar a su familia para vivir solo en la montaña; y a Toni, que trabaja con Emili y está secretamente enamorado de Sara. Cada uno de ellos descubre un nuevo Àlex a través de los otros y su ausencia les ayudará a replantearse sus objetivos y carencias. Este mosaico de personajes se completa con la llegada de Marta, la hija de Emili, que tras muchos años sin ver a su padre, viene de Francia para buscarle. Todos buscan otra forma de vivir. Cuando se separen, ninguno de ellos será el mismo.PREMIOS2001: Cannes: Nominada a la Palma de Oro
2001: Ondas: Mejor director.
2001: Bogota: Nominada a mejor película
2001: Butaca: Nominada a mejor película catlana y mejor actor catalán de cine (David Selvas)CRÍTICA+ "Cuidadoso filme que habla del paso del tiempo, de la vida, de la incomunicación, del silencio y de la destrucción de la naturaleza. A pesar de algunos fallos de guion, un filme sumamente interesante y en el que destaca la espontaneidad de un buen reparto." (Fernando Morales: Diario El País)
- "Quizás, el principal problema de Pau y su hermano es que no logra transmitir de forma convincente los verdaderos motivos que mueven a cada uno de los personajes. Como espectador se tiene la sensación de que algo falla, de que hay piezas del puzzle que no logran encajar." (Alejandro del Pino: Cinestrenos)PUNTUACIONES
5,5 5,4 6,4
NOTA MEDIA: 5,8
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