Paula Vázquez

No estoy operada
Es que tengo la regla

Paula Vázquez es una presentadora con pretensiones de actriz, conocida gracias a programas como El Euromillón, Pekín Express, Fama ¡a baliar! o la La isla de los famoS.O.S.
También ha coqueteado en el mundo del cine, eso sí, sin el éxito que obtuvo de la TV.
De joven presentaba cosas y estaba muy follable. Ahora es un estropajo que se le ha quedado una cara de engendro Michael Jackson que ningún hombre la quiere tocar y lejos quedaron esos tiempos en que le daban un millón de pesetas por tocar churras.
Ya ni dios la contrata porque está vieja y no tiene gracia.
Su físico más que mejorar ha empeorado hasta límites insospechados, teniendo una imagen desmejorada de extrema delgadez casi rayando la anorexia.
Para que hablen de ella se dedica a decir gilipolleces en Twitter a ver si la contrata Podemos con la esperanza de que Pablo Iglesias la azote hasta que sangre. Casi lo consigue cuando el chepudo rompió con la marquesa de Galapagar.
Como nadie le hace casito encuentra una vía de escape apuntándose a la nueva moda: el feminismo, así que da por culo con el feminazismo para rivalizar con Barbijaputa hablando del uso que se le da a la mujer en el mundo. Bastante irónico que diga esto cuando ella ha explotado su imagen a lo largo de toda su carrera con desnudos y posados de toda índole.
La edad no perdona y poco a poco su fama ha ido decayendo hasta casi desaparecer por completo.
Está convencida de que una mano negra truncó su carrera en televisión.
Mejor que vaya asumiendo es que su tiempo ya pasó, que si cuando pierdes el atractivo quedas fuera, es que no había más argumento que ese y el tiempo te ha puesto en tu sitio.
Biografía

El número E

El primer programa en el que participó Paula Vázquez fue Jeans, News and Rock&Roll en Antena 3. Un formato del cual apenas quedó recuerdo y que pretendía, un poco al estilo de La quinta marcha. Nadie recuerda haber visto este programa.
Intentó ser azafata florero del Telecupon. Pero cogió la bola y en vez de salirle un número le salió la letra E. Luego contó un chiste blasfemo, mal contado y con ninguna gracia. Evidentemente no la cogieron.

Tito Bachs

Pero sí consiguió ser una de las azafatas florero de el Un, dos, tres... responda otra vez, que presentó Josep Maria Bachs. Esa etapa del mítico programa que nadie recuerda. Alli se hacia llamar Paula Bachs y que por alguna razón se le hizo pasar por la sobrina del presentador.
El programa fue un fracaso y fue el primero de su lista.
Algo pasó que acabó la cosa mal y la vetaron en TVE.
Se fue a Antena 3 y lo primero que hizo fue copresentar No te olvides el cepillo, que fue un fracaso que duró solo 8 programas.

Canguuuuuuuros

Su primera incursión en la interpretación fue en Canguros una especie de Las chicas de oro con veinteañeras muy cutre. Solo es peor su estúpida canción con la que comenzaba la serie.
Tras una ristra de colaboraciones televisivas sin mucha historia, acaba en Telecinco. Pasó a presentar El juego del Euromillón con el que se ganó el cariño de la audiencia. Los cambios de horario y de conductora hicieron que desapareciera de la parrilla en 2002.
Acaba en Antena 3 otra vez, presentando programas de relleno, siendo el peor Xti. Ese presentado junto a Antonio Hidalgo que se sumó enseguida a la larga lista de fracasos de Antena 3 en el género de la telerrealidad. Se retiró sin previo aviso y tras sólo seis emisiones.

No me violes
Telematicamente

Con La isla de los famosos empezó la paulavazquezsexplotation. Antena 3 recuperó en 2003 el formato de Supervivientes de Telecinco para añadirle el componente de concursantes famosos. La jugada le salió redonda a la cadena, convirtiéndose en uno de sus escasos realities con éxito.
Estuvo al frente de las conexiones desde la isla (y en biquini) en las cuatro ediciones que duró.
La aventura en África de 2005 no superó las expectativas del canal y el formato terminó regresando a Telecinco.
Por esta época apareció en Últimas Vacaciones, película italiana  terriblemente mala. Un fracaso de taquilla cuyo único aliciente para visionar semejante bodrio es ver a una Paula Vázquez desnuda en la ducha y follando con las tetas fuera, operadas a más no poder.
Lo volvió a intentar con la infumable Kibris, la ley del equilibrio. No solo no triunfó con ella, si no que además está considerada como la peor del cine español. Su papel era de hija adoptiva de Drácula. El resto ya se puede hacer usted una idea.
También apareció en Íntimos, un cortometraje que nadie ha visto.

Malos tiempos
El éxito se le terminó a Paula Vázquez en Antena 3 con la desaparición de La isla de los famoS.O.S., relegándola a un segundo plano en televisión.
Luego le siguió ¿Cantas o qué? precursor de Tu cara me suena, que apenas duró un par de emisiones en Antena 3.
Intentó otra vez ser actriz con la serie Divinos. Fue un rotundo fracaso que solo duró 9 episodios.
Tras un paso efímero y nada destacable por TVE, acaba en Cuatro. Presentó Fama ¡a bailar!. El exito de este programa le impidió compaginarlo con las nuevas ediciones de Pekin exprés que cayó en manos de Raquel Sánchez-Silva. Aquello le jodió mucho y le produjo mucho resquemor. Peor fue cuando le dieron el formato a Cristina Pedroche. Se subía por las paredes.
En pleno éxito del programa de baile, cuando Cuatro todavía era un proyecto de Prisa, criticó abiertamente la fórmula de corazón que explotaba Telecinco con Aquí hay tomate. Nada le hacía presagiar que tras la fusión de unos meses más tarde tendría que conectar en directo desde la academia de baile con el mismísimo Jorge Javier Vázquez y su tropa de Sálvame.
Decadencia

Tengo 18

Tras la fusión de Telecinco y Cuatro la mandaron a paseo, sobretodo por rechazar ir a Supervivientes en 2011. Tania Llasera ocupó su puesto al frente de Fama terminando de hundir un formato que ya acusaba desgaste.
Volvió a Antena 3 donde presentó su último gran hito, el talent show El Número Uno, aquel concurso de cantantes donde Miguel Bosé ejercía de malo. La primera edición aguantó el tipo. Aún así, no pudo competir contra La Voz y su segunda edición acabó siendo un despropósito que bautizaron como El Número Uno Express para disimular la cancelación del programa.
A partir de ahí su carrera entró en declive. El siguiente programa fue Te lo mereces. La cadena decidió darle otra oportunidad poniéndola al frente de este programa para el prime time de la noche de los viernes. Es decir, un suicidio televisivo.
Evidentemente no pudo con Jorge Javier y su Sálvame Deluxe y el programa fue cancelado con tan solo dos emisiones. Antena 3 quitarse de encima a Paula Vázquez y no sabía cómo.
Luego quedó relegada a las dos de la madrugada compitiendo en audiencia con programas de videncia y casinos online. Pues se trataba de una especie de cementerio de elefantes, una forma como otra cualquiera de rellenar el tiempo que le quedaba a la presentadora de contrato en exclusiva con la cadena antes de prescindir de sus servicios.
Presentó un innecesario debate del programa Top Chef de la cadena Antena 3 llamado El almacén de Top chef, un late night donde acudían los concursantes eliminados a contar su experiencia.
Termina el año presentado las Campanadas 2014, junto con su compañera Anna Simon. Un regalo envenenado. compartir plano con una presentadora más joven, más guapa, más voluptuosa y con una carrera en pleno despegue. Los directivos de la cadena le dieron el golpe de gracia delante de toda España y, acto seguido, la pusieron de patitas en la calle.
Acaba haciendo malabares con el dinero de forma creativa hasta que Hacienda la pilla y que ella era muy buena, que Montoro le tenía manía, que fue el hombre manco.
No fue hasta 2017 tras 3 años en paro que vuelve a presentar un programa. Fue en Netflix. Presenta Ultimate Beastmaster y solo dura una temporada.
Luego presentó El puente, que  prometía ser una de las grandes revelaciones del canal de Movistar +. Fue un fracaso. En su segunda semana el programa cayó hasta datos que rozaban el ridículo con números propios de una cadena local.
Presentó en esa misma plataforma FAMA! a bailar y se estrelló en audiencias y relevancia.
Evidentemente la culpa no es de ella, es de una mano negra y del heteropatriarcado.