La verdad es que cada vez que veo que una noticia se refiere a un clérigo radical islamista no suelo ni leer, pero esta vez si porque me llamó la atención la frase: “Toda Europa será musulmana, nosotros tenemos muchos hijos y ellos prefieren tener un perro o un pez”. Bien,. pues la verdad es que desde el punto de vista del clérigo Anjem Choudary, que fue quien en teoría dijo esta frase, tiene toda la razón. Esta es una forma de invadir pacífica y como de poco a poco.
Pero lo que más me llamó la atención fue aquello de “prefieren tener un perro o un pez”, porque también lleva toda la razón. La mentalidad europea en cuanto a la concepción de hijos es un tanto extraña, tanto que lo vemos como incluso algo inculto o de país tercermundista. Tenemos una mentalidad en la que ni las mujeres ni los hombres tienen ninguna gana de tener hijos, siempre hay algo más importante que hacer que eso y desde luego nunca se encuentra dentro de nuestras prioridades.
“No, ahora no por trabajo, estudios…” El caso es que nunca es el momento. Estamos considerando algo que es completamente natural como una incomodidad para nuestro desarrollo como personas, tanto a nivel laboral como a nivel personal, nos molesta sin más, y no es lógico. El tener hijos forma parte de la naturaleza humana, como el comer, como el beber o como dormir, nosotros estamos renunciando a ello; llegamos incluso al extremo de considerar el tener hijos como algo mal visto. Por más vueltas que le doy no consigo entender como han conseguido convencernos de que eso pueda ser malo.
Evidentemente el planteamiento que nos hacemos es también la situación económica por la que estemos atravesando, pero en el fondo no es más que una excusa más. En algún momento de nuestra educación, o más bien de nuestra manipulación, nos han convencido que es incluso mejor y más moderno matar a un hijo en el vientre materno que esperar a que nazca. Para ese aborto siempre hay una excusa válida, para su nacimiento no hay ninguna que valga.
A mi todo esto me suena más a una extraña reeducación que estamos sufriendo en nuestra sociedad, una manipulación que va a provocar muchos cambios en los próximos años. Uno de ellos, y eso es más que evidente, es un cambio social en nuestros países; evidentemente las gentes que provengan de otras culturas donde tener hijos no esté mal visto, como en el caso de los musulmanes, pasará a ser la población dominante. Y eso, que en principio no debería ser ni bueno ni malo, va a provocar unos desajustes y unos cambios en muchos países occidentales que ya veremos que consecuencias trae.
Creo firmemente que muchos de los que lean este texto pensarán de mi incluso que puedo ser un retrógrado o un racista; la verdad es que me importa bastante poco lo que piensen, porque no soy ni lo uno ni lo otro. Analizo una realidad que está sucediendo y que en un futuro acarreará unas consecuencias. Cuando eso traiga unas consecuencias negativas, que es lo que yo creo que va a pasar, es posible que entonces analicemos el por qué de nuestra mentalidad sobre la natalidad. Es posible que entonces pensemos que es mucho más placentero ver a tu hijo crecer que ver tu despacho en una planta superior..