Pedraza. Un imprescindible de España
Un poco pretencioso podría parecer el título de este artículo si yo fuese oriundo de Pedraza, pero nada más lejos de la realidad. Simplemente quiero hablaros del que para mí es uno de los pueblos con más encanto de España que está bastante cerca de Segovia, una de mis ciudades preferidas en una de mis provincias preferidas.
Si bien es verdad que así es como te recibe este precioso pueblecito de la provincia de Segovia: "Pedraza, Uno de los pueblos mas bonitos de España", reza el cartel de la subida hacia el pueblo que hago caminando.
Es la primera vez que lo visito y me he acercado para conocer este pueblo en la noche de las velas. Mas adelante tuve que hacer una segunda visita en otro día cualquiera, ya te explicaré por qué.
Pedraza tiene dos diferentes situaciones para conocerlo, y pardiez que son bien diferentes la una de la otra!.
La primera es la noche de las velas. La noche de las velas se celebra el primer y segundo sábado de Julio. Y básicamente consiste en no utilizar la energía eléctrica para iluminar las calles, sólo se ilumina con la luz de miles y miles de velas que se colocan en las calles, balcones, jardines, huertos, etc.
La segunda es un Sábado o Domingo corriente y moliente, mejor si es en invierno que hay todavía menos gente. No hay velas y las calles estarán iluminadas por farolas de luz también corrientes y molientes, pero te aseguro que tiene sus ventajas.
Pedraza en la noche de las velas
Como te he adelantado, la noche de las velas consiste en iluminar las calles exclusivamente con velas. Las velas las van encendiendo los propios turistas aunque son los habitantes y el ayuntamiento los que colocan las velas por todo el pueblo.
Además, el propio Sábado se hace un concierto de música clásica en el castillo con cena incluida.No hace falta decir que la imagen de un pueblecito como Pedraza iluminado a la luz de las velas mientras escuchas el concierto nº 1 para piano de Tchaikovsky es del todo bucólica e inspiradora. Pero debo bajarme a la realidad de la situación y de lo que fue la visita. Un auténtico infierno.
Y el motivo fundamental por el que fue algo completamente insufrible es por la cantidad impresionante de gente que había.
No te voy a negar que a mí no me gustan demasiado las aglomeraciones de gente, pero las tolero. Lo que viví allí no fue eso, iba mucho más allá. Había tanta gente que no podíamos caminar por la calle. Como cuando estás en una discoteca que esta completamente llena de gente y no puedes caminar. Fue angustioso y una experiencia nada recomendable la verdad.
Tuvimos que dejar el coche a 3 kilómetros del pueblo y desde allí ir caminando porque la cola de coches era interminable. La guardia civil estaba a verlas venir y no te indicaba nada ni te decía nada. Se había habilitado un parking provisional en unos terrenos pero estaba colapsado.
Es verdad que es bonito ver el pueblo iluminado con velas y la música clásica y todo eso, pero cuando se puede disfrutar un poco sin angustia. Era imposible comprar una botella de agua porque las colas eran interminables, ya ni hablar de tomar un cafe o una cerveza en la plaza. Pensarás que estoy exagerando pero te garantizo que no.
Aun así, tuvimos la oportunidad de ver algún huerto o jardín totalmente iluminado por las velas que es muy bonito, como el que puedes ver en la foto. Yo no pude hacer la foto porque no era capaz de llegar al murete de la gente que había, me la tuvo que hacer vero desde una esquinita, pero salió genial!.
Pedraza un Sábado o Domingo cualquiera.
Esto ya es harina de otro costal. Nos decidimos a volver a Pedraza poco después de nuestra primera experiencia para ver si compensábamos la angustia y el mal sabor de boca y la verdad que un acierto total.
Subimos hasta lo más alto del pueblo, cerca del castillo con el coche y pudimos aparcar tranquilamente. En el castillo hay visitas guiadas que por cierto son muy interesantes. Nosotros hicimos la que empezaba después de comer, sobre las 17:00.
Por la mañana nos dedicamos a pasear por el pueblo tranquilamente y pudimos disfrutar de sus rincones, sus calles que te transportan a una época medieval, sus tiendas de dulces o de decoración.
El mejor lugar para mí para tomar el aperitivo es la plaza mayor, tienes varias opciones y todas son buenas. Y como no, nos dimos un pequeño homenaje en el Corral La Joaquina, muy bien todo, rica comida y buen trato.Después de comer, sobre las 15:30 nos hicimos una visita a la cárcel de la villa. La visita es guiada y muy económica. Ilustra muy bien como era una cárcel de la época y los elementos están bien restaurados o conservados.
Las personas que te atienden son amables y la guía tenía un buen conocimiento de lo que estaba explicando. Además tuvo bastante paciencia con nosotros porque estábamos todo el rato parando para hacer una foto allí y otra allá, sin problema ninguno.
Salimos de la cárcel y paseando otro poco llegamos al castillo de Pedraza. Este castillo alberga el museo al pintor vasco Zuloaga. En los patios del castillo está permitido hacer fotos pero en el museo no.
Este pintor compró el castillo cuando estaba prácticamente en ruinas y lo restauró y cuidó. Además, al elegir Zuloaga este castillo para su retiro, otra gente famosa y nobles decidieron adquirir una segunda vivienda en Pedraza lo que sirvió para reanimar el pueblo y su economía.
La visita al castillo dura aproximadamente una hora y media y el guía fue muy atento y servicial, además tenía un amplio conocimiento del castillo, de Zuloaga y de su obra.
Tras visitar el castillo quisimos ir al Centro del Águila imperial pero era domingo y el domingo abre hasta las 15:00, ya tenemos excusita para volver, ver el Centro del Águila imperial y darnos otro homenaje!. ¿Me recomiendas algún otro sitio de Pedraza?