El peeling es un tratamiento estético que es utilizado para provocar daño cutáneo controlado inducido por la aplicación de ácidos orgánicos en la piel. El objetivo principal de este tratamiento es la alteración fisiológica de la apariencia de la piel al conseguir una regeneración de la nueva epidermis.
El peeling está indicado para muchas patologías como el acné y sus secuelas, manchas hormonales o los signos de fotoenvejecimiento, según explican desde Laboratorios Sebbin, distribuidores de peeling químico.
Tratamiento del fotoenvejecimiento con peeling
Sobre la aplicación del peeling en el tratamiento del fotoenvejecimiento existen muchos aspectos interesantes.
Los signos de fotoenvejecimiento aparecen en una piel que ha estado muy expuesta a las radiaciones solares, lo que hace que pierda elasticidad, firmeza e hidratación fácilmente, entre otras características. Mejorar su aspecto se puede realizar con el uso de peelings.
Según el grado de fotoenvejecimiento que presente la piel, la composición del peeling deberá ser una u otro. Desde Sebbin apuntan los siguientes consejos:
- Niveles leves de fotoenvejecimiento: en estos casos se harán usos de peeling químicos con ácido tricloroacético, ácido láctico, ácido pivúrico o ácidotricloroacético.
- Niveles moderados de fotoenvejecimiento: se emplearán peeling químicos compuestos de ácido pivúrico o ácido glicólico.
- Niveles avanzados de fotoenvejecimiento: se aplicará el tratamiento con peeling químicos que contengan ácido tricloroacético, ácido salicílico, ácido láctico y resorcina.
Los porcentajes de esos ácidos serán cada vez más superiores a medida del aumento de gravedad del fotoenvejecimiento. Por ello, este tratamiento será individualizado tras el estudio de las características de la piel de cada persona.
Fuentes:
- Laboratorio Sebbin.
- Sociedad Española de Medicina Estética.