Título: El hobbit: La batalla de los Cinco Ejércitos
Director: Peter Jackson
Guionistas: Fran Walsh, Philippa Boyens
Género: Aventura, Fantasía
Duración: 144 minutos
Puntuación: 7
Trilogía El hobbit:1. El hobbit: Un viaje inesperado2. El hobbit: La desolación de Smaug3. El hobbit: La batalla de los Cinco Ejércitos
Sinopsis:
Después de haber recuperado el reino del Dragón Smaug, la Compañía ha desencadenado, sin querer, una potencia maligna. Un Smaug enfurecido vuela hacia la Ciudad del Lago para acabar con cualquier resto de vida. Obsesionado sobre todo con el reino recuperado, Thorin sacrifica la amistad y el honor para mantenerlo mientras que Bilbo intenta frenéticamente hacerle ver la razón por la que el hobbit toma una decisión desesperada y peligrosa. Pero hay aún mayores peligros por delante. Sin la ayuda aparente del mago Gandalf, su gran enemigo Sauron ha enviado legiones de orcos hacia la Montaña Solitaria en un ataque furtivo. Cuando la oscuridad se cierna sobre ellos, las razas de los Enanos, Elfos y Hombres deben decidir si unirse o ser destruidos. Bilbo se encontrará así en la batalla épica de los Cinco Ejércitos, donde el futuro de la Tierra Media está en juego. Opinión personal:
Esta es la última parte de la trilogía El hobbit, cuya primera parte me gustó mucho y me pareció una muy buena adaptación, y cuya segunda parte, aunque me convenció un poco menos, siguió en la misma línea que la primera.
El hobbit: La batalla de los Cinco Ejércitos nos trae todo lo que nos había prometido: un montón de acción, impresionantes efectos especiales, combates por doquier y ni un momento de respiro. Sin embargo, ha sido la que menos me ha gustado de las tres.
Empieza justo después del final de la segunda película, con Smaug volando hacia la Ciudad del Lago para desatar su ira. Con este panorama, ya os podéis imaginar que desde el primer momento el caos, la tensión y las batallas están presentes. Prácticamente, esta película es un no parar. Aunque despliega con mucha fuerza, me dio la sensación de que el comienzo, en el que se cierra un pilar muy importante de la historia, se terminaba demasiado rápido. Como si me dejaran la miel en los labios, vaya.
Poco tiene que contarnos esta película ya en lo referente a la trama, pues prácticamente todo se ha dicho en las anteriores, y exceptuando algunas cosas que se desarrollan y que descubrimos en ésta, el film básicamente es eso, lo que dice el título: una batalla constante. La típica batalla del final de una gran historia, que tiene que ser enorme y épica y que suele durar lo suyo, pero no más de dos horas... pues sí, han hecho una película entera (y no precisamente corta) para contarnos esa eterna batalla.
En fin, no todo es malo, está claro. Hubo partes que me gustaron mucho, como todo lo relacionado con la Piedra del Arca. Pero, sin duda, la trama ya no es la misma que en las películas anteriores porque, básicamente, ya casi no hay trama, la historia ya casi se ha acabado y sólo nos queda eso: la acción, la lucha.
Y esto tiene su parte buena, por supuesto, ya que el ritmo de la película no decae en ningún momento, pero terminé saturada de la batalla. En serio, estaba deseando que se acabara de una vez. Y es que esta película tiene momentos épicos cada dos por tres y combates imposibles que buscan dejar con la boca abierta pero que sólo logran una sensación de que todo está demasiado recargado. Y sí, esas partes acabaron conmigo. Momentos totalmente clichés en los que el héroe mata a uno de los tantos malos con un giro imposible o haciendo gala de una fuerza sorprendente, en los que los protagonistas se libran (cómo no) de la muerte en el último momento, Légolas desafiando todas las leyes de la gravedad... por favor. En mi opinión, ese fue el peor fallo de esa película: que pecó de querer ser demasiado épica. Sólo hubo una cosa que no fue predecible SPOILER la muerte de Thorin FIN SPOILER y que consiguió que pensara: ¡vaya! eso no me lo esperaba.
Por lo demás, en general se nota el tono de despedida de esta película, del último adiós, que sobre todo durante la última parte, nos llena de melancolía. Las últimas escenas con la banda sonora y los maravillosos paisajes... ah, me hicieron suspirar. Y por cierto, mencionar que me gustó mucho cómo hilaron el final de esta película con el principio de El señor de los Anillos.
En resumen: aunque El hobbit: La batalla de los Cinco Ejércitos, me ha parecido la más floja de las tres, ya que cuenta con por lo menos una hora de lucha constante y de escenas y momentos demasiado clichés y épicos, la trilogía me ha dejado con un buen sabor de boca y la voy a recordar con mucho cariño.