La mini maratón de Franka
Efectivo film que acaparó la atención del público y de críticos de
prensa a partir de una historia de escasa duración (73 minutos) dotada de un
ritmo lleno de nervio.
Franka Potente es la protagonista de este relato poco común, interpretando a Lola,
una joven que busca la forma de reunir una suma importante de dinero que su
novio (Moritz Bleibtreu) ha perdido y
debe ser entregado a un jefe de la mafia. Lola debe ingeniárselas para aunar
tamaño efectivo y obrar velozmente, disponiendo tan solo de veinte minutos para
concretar la operación.
Tom Tykwer, director y guionista, baña la proyección de una atmósfera
adrenalínica, en donde no hay lugar a pensar demasiado. Su objetivo es llevar
al espectador a disfrutar de la agilidad y la energía que porta el relato,
utilizando e intercalando infinidad de recursos cinematográficos que posean una
misma simetría rítmica. Para ello se encarga de apelar a una gran diversidad de
planos y movimientos de cámara, así como también a la animación, al empleo de
instantáneas fotográficas, algún que otro flashback y una banda sonora tecno,
electrónica, aguda.
Pero probablemente lo más interesante de esta algo videoclipera película
radica en la elección por incluir variadas determinaciones según pequeños
detalles que surjan en el camino de Lola, modificando cada elemento la conclusión.
Tres alternativas, tres resoluciones diferentes, en donde cada acción comienza
igual pero ante cualquier pormenor que emerja el final cambiará rotundamente, en
una suerte de efecto mariposa.
Corre, Lola, corre es un ejercicio visual interesante, creativo y con estilo propio. Una
propuesta diferente que quizás peque de no dejar una sensación de satisfacción
plena.
LO MEJOR:la narrativa y el dominio de diferentes recursos técnicos al servicio
de una misma idea: la de generar tensión y no dejar caer en ritmo al film.
LO PEOR:tiene aires más bien de cortometraje. No termina de llenar. Los
momentos de animación podrían haber sido mejores.
PUNTAJE:7