La primera parte de la temporada fue el equipo de moda, en el Eithad, cada 15 días, se vivía una bacanal de goles y fútbol que mantuvo al equipo en la parte alta de la clasificación, todavía sigue allí, pero, en este último mes, ha dado muestras de flaqueza, cayendo eliminado de la FA Cup ante el Wigan y ante el Barça, sin casi oponer resistencia, en Champions League. La situación no es crítica, ni mucho menos, se ha ganado la Capitol City, ante el Sunderland y se depende de sí mismo para lograr la Premier League, al tener 3 partidos menos y estar a 6 puntos del Chelsea.
El City, es un conjunto construido de arriba a abajo, es decir, en la zona de la delantera y los 3/4 tiene mucha más calidad y variantes que en la de mediocentro y la defensa, lo que, condiciona, irremediablemente, su juego. Cuando la fase atacante no está inspirada (los motivos pueden ser variados, aunque normalmente tienen que ver con las lesiones y las decisiones tomadas por Pellegrini para sustituir a los teóricos titulares), el entramado defensivo no es lo suficientemente sólido como para resistir las embestidas rivales.
Manchester City 2013/2014
La primera duda que se plantea el técnico chileno tiene que ver con el esquema, para desarrollar la mayor cantidad de potencial ofensivo, ha optado por iniciar los partidos con un 4-4-2, que realmente se convierte en un 4-1-3-2, haciendo Fernandinho, un jugador que, hasta este año, había jugado más adelante y con menos responsabilidad defensiva, como ancla por delante de los centrales (aunque a veces se deja llevar y se adelanta hasta la frontal rival, dejando un espacio enorme entre la línea defensiva y la siguiente línea de jugadores, en este caso, la de mediapuntas). Esto no suele ser un problema porque los de arriba son tan contundentes que logran la ventaja necesaria como para que el rival deje de tener esperanzas de llevarse algo positivo del partido.
Cuando ha tenido lesiones, lo que ha intentado el Ingeniero, ha sido intentar compensar este tremendo desequilibrio ya sea con la inclusión de un pivote, normalmente Javi García, o con la de un jugador de banda más trabajador, Milner, pero estas alternativas no han acabado de cuajar. teniendo un efecto contraproducente, se pierde algo de potencia ofensiva pero esta no es compensada con seguridad defensiva. Con todo este previo, la defensa se encuentra expuesta, en los laterales, a duelos individuales, por lo que, sobre todo el flanco izquierdo, que carece de especialista defensivo, sufre sobremanera. Por el centro, también el sufrimiento es importante, el espacio entre líneas hace obligatorio el jugar con la defensa muy adelantada, situación en la que Kompany se encuentra cómodo pero, al tener a su otro central más rápido, Nastasic, bastantes partidos lesionados, la alternativa, Demichelis o, en menor medida, Lescott, son jugadores veteranos, carentes ya de esa chispa de velocidad, que sufren muchísimo. El portero, también en tela de juicio, tiene que actuar en más ocasiones de las que se le supone a un guardamenta de un equipo de máximo nivel, ya que es, relativamente sencillo realizar un centro o un disparo lejano.
La solución para esto, como se ve, no está sólo en fichar 2-3 jugadores de más nivel que permitan que los de arriba sigan campando a sus anchas, sino en diseñar e implementar un sistema en el que se minimicen estos desequilibrios sin perder demasiada frescura ofensiva.