A principios de este mes, el presidente de México y la primera dama fueron homenajeados públicamente por la asociación civil Coalición de Colonias Populares con un asentamiento en Valle de las Palmas, ubicado en Tijuana, Baja California, al cual nombraron Colonia Enrique Peña Nieto y Plaza Angélica Rivera.
La iniciativa fue presentada en 2013 por Agustín Pérez Rivero, un militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el mismo partido político del mandatario mexicano, pero no fue hasta este mes cuando los medios locales reportaron la finalización del proyecto.
El propio Peña Nieto, cuando se desempeñó como gobernador del Estado de México (2005-2011), no escatimó en honrar la memoria de su primera esposa, fallecida en 2007, y mandó inmortalizar su nombre en diversas clínicas y hospitales. Algunos de los recintos aún conservan su nombre, tales como el Albergue Temporal Infantil Mónica Pretelini, el Centro de Integración Juvenil Mónica Pretelini de Peña y el Hospital Materno Perinatal Mónica Pretelini.
Con un nivel de popularidad histórico del 12%, de acuerdo con el diario ' Reforma', el presidente Peña Nieto no es el único político que ostenta su nombre en alguna colonia de México. El expresidente de este país, Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), tiene varias colonias en su honor en los municipios de Morelos, Tamaulipas, Puebla, Baja California y en el Estado de México. En este último estado, la colonia se encuentra en una región conocida como Valle de Chalco Solidaridad, una de las zonas más pobres del país.
El exgobernador del Estado de México, Arturo Montiel Rojas (1999-2005), es otro de los políticos que tiene diversas colonias con su nombre. Una de ellas, y quizá la más emblemática, está ubicada en el barrio de Chimalhuacán, en el Estado de México.
Asimismo, el exmandatario mexiquense se caracterizó durante su gestión por inaugurar instituciones públicas con su nombre y el de su exesposa, Maude Versini. Tal es el caso del Hospital General Maude Versini de Montiel, el cual fue rebautizado años más tarde como Hospital General de Atlacomulco, ubicado en el municipio del mismo nombre.
La capital mexiquense está plagada de calles bautizadas con nombres de políticos priistas. A la entrada de la ciudad, se encuentran las avenidas Alfredo del Mazo, Salvador Sánchez Colín, Isidro Fabela, así como las avenidas José López Portillo, Manuel Ávila Camacho y centenares de avenidas, conjuntos habitacionales y escuelas con el nombre de Adolfo López Mateos, presidente de México de 1958 a 1964.
El expresidente Vicente Fox Quesada, quien gobernó México de 2000 a 2006 bajo la bandera del Partido Acción Nacional (PAN), también cuenta con varias calles en su honor en la colonia Imperial, en su estado natal de Guanajuato, y otras más en la región del Platanar, en Jalisco y en Aquismon, en San Luis Potosí. Incluso el propio líder de la izquierda en México, Andrés Manuel López Obrador, cuenta con un parque en la capital mexicana.