Michael Phelps terminó con gran estilo su participación en el Gran Premio de Mesa (Arizona), su primera competición en ocho meses, al ganar la noche del sábado la prueba de los 100 m libres.
Viniendo de atrás en una cerrada porfía con su compatriota Ryan Lochte, Phelps tocó primero la línea final para marcar un tiempo de 49.72 segundos, cinco centésimas menos que su eterno rival y amigo. El tercer lugar de la prueba fue para Conor Dwyer (50.02).
La victoria de Phelps en los 100 metros es más contundente porque sólo 25 minutos antes había competido en la final de los 200 m combinados, en la que quedó tercero, detrás de Lochte y Dwyer.
“Este es mi mejor día aquí, ganando los 100 metros después de los 200 medley. No fue fácil”, dijo el nadador de Baltimore, de 29 años.
Phelps logró tranquilizarse por su victoria en los 100 m estilo libre, dos días después de haber ganado los 100 m mariposa, su disciplina favorita.
“No sé lo que pasó en la vuelta después de los primeros 50 metros, sentí algo diferente, me di cuenta de que yo era más rápido que mi vecino y me dije ‘diablos, me siento bien’ y avancé“, explicó.
“Es una buena recuperación”, concluyó el ganador de 22 medallas olímpicas, 18 de ellas de oro, y quien espera participar en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Phelps, que había competido por última vez en agosto de 2014 en el Campeonato Pan-Pacífico de Australia. regresó después de seis meses de suspensión impuesta por su federación por conducir en estado de ebriedad.
Phelps, de regreso a las piscinas desde enero de 2014, cuando se retiró después de los Juegos Olímpicos de Londres, no estará en el equipo de Estados Unidos para el Mundial 2015 en Kazán (Rusia) este verano, debido a la suspensión.