Poesía
Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable.
Hija mía, es mejor vivircon la alegría de los hombres,que llorar ante el muro ciego.Te sentirás acorralada,te sentirás perdida o sola,tal vez querrás no haber nacido.Yo sé muy bien que te diránque la vida no tiene objeto,que es un asunto desgraciado.Entonces siempre acuérdatede lo que un día yo escribípensando en ti, como ahora pienso.La vida es bella, ya veráscomo a pesar de los pesarestendrás amigos, tendrás amor.Un hombre solo, una mujerasí tomados, de uno en unoson como polvo, no son nada.Pero yo cuando te hablo a ti,cuando te escribo estas palabras,pienso también en otra gente.Tu destino está en los demás,tu futuro es tu propia vida,tu dignidad es la de todos.Otros esperan que resistas,que les ayude tu alegría,tu canción entre sus canciones.Entonces siempre acuérdatede lo que un día yo escribípensando en ti, como ahora pienso.Nunca te entregues ni te apartesjunto al camino, nunca digasno puedo más y aquí me quedo.La vida es bella, tú veráscomo a pesar de los pesarestendrás amor, tendrás amigos.Por lo demás, no hay elección,y este mundo, tal como es,será todo tu patrimonio.Perdóname. No sé decirtenada más, pero tú comprendeque yo aún estoy en el camino.Y siempre siempre acuérdatede lo que un día yo escribípensando en ti, como ahora pienso.José Agustín Goytisolo, 1928 - 1999.Escritor y poeta español de la Generación del 50.