Iniciar una vida creativa requiere asumir un desafío. Supone por encima de todo, atrevernos a romper viejos patrones y costumbres que nos hacen avanzar en círculos. La persona creativa es audaz y desafiante. Cuando la vida le golpea, no reacciona dejándose caer NO¡, sino que actúa de manera innovadora sacando partido a las dificultad, intuyendo oportunidades, escuchando a su intuición y dando respuestas originales. Es sinónimo de autoinvención y atrevimiento, dos palabras que bien conjugadas nos ayudan a tener una realidad más libre, acorde a nuestro potencial.
A menudo, cuando abordamos el tema de la innovación y la importancia de hacer uso de una mente creativa, damos por sentado que esta competencia requiere solo de ser capaces de producir ideas nuevas y diferentes. Ahora bien, asumir esto último es quedarnos cortos. La creatividad va más allá del universo cognitivo, porque lo que requiere de nosotros es acción.
Dejar de reaccionar, actúa y atrévete a iniciar una vida creativa
¿Pensar es enemigo de la creatividad?
No pienses, decía Ray Bradbury, pensar es enemigo de la creatividad, simplemente, atrévete a hacer. Esta frase encierra valiosos trazos de sabiduría que bien merecen tenerse en cuenta. Muchos de nosotros nos hemos acostumbrado a reaccionar ante la vida; pasan determinados eventos y nos limitamos a actuar ante ellos como hojas de viento que son llevadas aquí y allá.
Pensamiento lateral

- El pensamiento lateral nos ayuda a ver los problemas desde nuevas perspectivas.
- Es ir más allá del sentido lógico, es jugar con la realidad, hacer combinaciones, buscar relaciones, desafiar, romper viejos esquemas…
- Asimismo, esta técnica nos anima a provocar al pensamiento para elegir caminos nuevos e inexplorados.
- Es ir más allá del simple confort de la lógica.
