Pensé que iba a haber fiesta (2013)

Ana (Elena Anaya) acaba de empezar una relación pasional con el ex marido de su mejor amiga: Lucía (Valeria Bertuccelli). Hace ya cuatro años que la pareja se divorció, por lo que, en principio, no hay obstáculos en el horizonte. Sin embargo, Lucía se siente traicionada. Esta película es una reflexión, cómica y dramática, sobre dónde están los límites del amor, la amistad y la fidelidad. Dos mujeres tan agradables como competitivas que jamás imaginarían que terminarían siendo enemigas.

Calificación: 4,963.

Tráiler de la Película

Ficha:

Título Original: Pensé que iba a haber fiesta.
Director: Victoria Galardi.
Guionista: Victoria Galardi.
Intérpretes: Elena Anaya, Valeria Bertuccelli, Fernán Mirás, Esteban Bigliardi, Esteban Lamothe, Abigail Cohen.
Productores: Victoria Galardi, Cindy Teperman, Cristina Huete, Nathalia Videla Peña.
Fotografía: Julián Ledesma.
Música: Niño Josele (Juan José Heredia Heredia).
Montaje: Alejandro Brodershon.
Dirección Artística: Patricia Pernía.
Diseño de Vestuario: Lala Huete.
Países: Argentina, España.
Lugares de Rodaje:
Fechas de Rodaje: De 26-11-2012 a 23-12-2012.
Año: 2013.
Duración: 85 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 7 años.
Género: Comedia, Drama.
Estreno: 10-01-2014.
Distribuidora: Caramel Films, S. L.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 13.
Recaudación: 89,50 €.

Crítica:

13-01-2014 – ANTÓN MERIKAETXEBARRIA

Amigas muy íntimas

Que el llorado cineasta francés François Truffaut ha influido a un montón de directores en medio mundo es algo de lo que no cabe la menor duda. También en el cine argentino, del que la realizadora Victoria Galardi es una de sus más prestigiadas representantes actuales. Es obvio que en “Pensé que iba a haber fiesta”, la máxima responsable de “Amorosa soledad” tiene muy presente la ética y la estética propia de Truffaut, en relación con su película “La mujer de al lado” (1981), puesto que se trata de la historia de dos amigas inseparables, Lucía y Ana, cuya relación es puesta a prueba cuando la segunda se enamora del exmarido de la primera.

La experimentada actriz argentina Valeria Bertuccelli y la versátil artista española Elena Anaya son las encargadas de dar vida a ambos personajes, en una discreta comedia con ribetes dramáticos, enmarcada casi por completo en una casa con piscina. En principio, el punto fuerte de la función era la sistemática confrontación entre ambas chicas; sin embargo, resulta a todas luces desdramatizada, superficial, puesto que la sangre nunca llega al río. Además, las pequeñas observaciones curiosas con que se salpican los rifirrafes afectivos entre Ana y Lucía carecen de entidad.

De todas formas, “Pensé que iba a haber fiesta” es una película que se deja ver, gracias sobre todo a las matizadas interpretaciones de Bertuccelli y Anaya. Dos mujeres bellas como pájaros que vuelan, como flores mecidas por el viento… Me parece claro que las dos han entendido muy bien las motivaciones, los dimes y diretes de los personajes, ya que a través de sus incandescentes caracterizaciones se transparenta con una fuerza considerable lo que han afirmado muchos psicoanalistas: la conexión íntima que existe entre la represión sexual y lo enrevesadas que muchas veces pueden llegar a ser las relaciones sexuales entre los adultos.