Peor imposible.

La gestión de la lucha contra el coronavirus organizada por el gobierno del Mentiras no puede ser más desastrosa, y encima a los disientes de la barbaridad que se está cometiendo en la democracia plena y consolidada no solo se les critica duramente con todos los insultos posibles y algunos inventados, además y sobre todo se les califica de traidores y enemigos de la patria.

Por más que el ministro del Interior Marlaska mienta de manera miserable al decir que el procedimiento que se usa en España para combatir el virus es el más severo de Europa y unos de los más severos del mundo, los únicos ejemplos que puede poner el Estado español de países que han actuado de manera parecida son varios que no se han tomado totalmente en serio el virus y/o han fracasado frente al virus como Irán, mientras lo que propone y exige el President Torra, el confinamiento total de Madrid, Catalunya y algún otro, es lo que aconsejan los expertos sin excepción y lo que han hecho varios países cuando no les ha quedado más remedio que garantizar el fin del problema.

Para completar la barbaridad han añadido el ejercito al equipo de responsables de la animalada, mientras todos los demás países que han recurrido al ejercito lo han hecho limitándolo a la cuestión sanitaria, solo España y países como China, India o Argentina lo utilizan además para controlar a la población.

Las democracias civilizadas funcionan de muy distinta manera que la democracia plena y consolidada. En Alemania, Baviera se ha declarado en confinamiento total y para hacerlo no ha precisado la autorización de nadie del gobierno, ni Merkel ni la ministra del Ejercito, aunque si la hubiese necesitado la ministra del Ejercito sin duda se la habría dado porque la de Alemania no es una idiota.

Lo que se ha llegado a decir del President Torra por haberse atrevido a disentir de la estupidez hace todavía más inmensa la barbaridad, y quien se ha llevado también una soberana tanda de insultos es el Dr. Oriol Mitjá por haberse atrevido a explicar lo que se debería estar haciendo. El Dr. Mitjá es un gran epidemiólogo que paso varios años en Nueva Guinea donde desarrolló un procedimiento que mejoró enormemente la eficacia y el control de las vacunas, pero para la pocilga mediática solo cuenta el haberse atrevido a disentir.

La ministra del Ejercito Margarita Robles, que no tiene pajolera idea de medicina, pero ahora es una de los principales responsables de la lucha contra el virus a pesar que en ella el ejército no tendría que pintar nada, por segunda vez, dedicó un largo comentario plagado de insultos y enormes descalificaciones contra el President Torra, en una gran demostración que en el fascismo franquista no se puede disentir, solo obedecer, y a los disidentes se les señala duramente con el dedo.

La ministra del ejército de un país democrático y civilizado en primer lugar no tendría responsabilidad alguna en la lucha contra el virus, y si algún político declarase al ser entrevistado por la BBC algo que no fuese de su agrado en vez de descalificarlo de manera barriobajera haría llegar a la BBC sus argumentos en contra de lo que se declaró en la entrevista, pero en el fascismo franquista con rebuznar contra el disidente es suficiente.

El resumen de la barbaridad es: se crea por negligencia un foco descontrolado del virus en Madrid, también por negligencia y al no haber confinado Madrid cuando debía hacerse se ha extendido el virus a otras comunidades, ante la escasez de recursos expolian los medios sanitarios para abastecer Madrid que sigue sin estar confinado, y para evitar que Catalunya sea distinta de Madrid impiden su confinamiento, no vaya a ser que tengan razón y les funcione. D E M E N C I A L