Librería Atenea (Ávila). José García Moreno y su hijo, denominados los Pepes, son los libreros de Atenea, una librería enclavada en una ciudad con un alto poder cultural. Abierta desde 2001, este pequeño comercio aboga por un cambio en el número de lectores después de la COVID-19 y por avivar la economía de barrio.
P.- ¿Cómo y en qué año empezaste en el negocio del libro?
R.- Empecé en octubre de 2001. Un par de meses antes mi mujer y yo estábamos buscando un local para abrir una librería, el negocio que más me gustaba para emprender, y vimos que la librería que ahora regento se traspasaba. Entramos y nos informamos. Solo tardamos dos días en decidirnos.Casi empecé de cero, ya que prácticamente lo único que se conservó fue el nombre.»Quiero aclarar que mi mujer no trabaja en la librería, puesto que tiene otro trabajo a tiempo completo. Sin embargo, tanto a ella como a mí nos encantan los libros y siempre hemos estado los dos involucrados en este proyecto.
P.- Creo que el sueño de todo amante de los libros es que sus padres tengan una librería, ¿tu hijo, que trabaja contigo, también quiso ser siempre librero?
R.- Sí, siempre. Cogimos la librería cuando él tenía 3 años y desde pequeño siempre fue a la tienda a escoger los libros que leía. Disfrutaba mucho eligiéndolos, a menudo con serios problemas para decidirse solo por uno de ellos. Desde que empezó a ir a la librería a elegir sus libros, tuvo claro a lo que quería dedicarse. Le gusta mucho la lectura y también le gusta mucho el trato con la gente.
P.-Padre e hijo, ¿cómo os organizáis en la librería?, ¿los dos hacéis de todo (recepción de libros, redes sociales, atención al público, etc.?)
R.- En general hacemos los dos de todo, aunque cada uno dedica más tiempo que el otro a diversas tareas. Por ejemplo, de los pedidos y de los escaparates me ocupo fundamentalmente yo, mientras que de las redes sociales y de la página web se ocupa más él.P.- ¿Cómo se comporta una ciudad tan cultural como Ávila con la literatura?
R.- Ávila es una ciudad que ama los libros y los tiene muy presentes en su agenda cultural. Desde hace algún tiempo, el Área de Cultura del Ayuntamiento de Ávila organiza todos los años presentaciones de libros de distintos géneros en una actividad muy conocida y valorada por los abulenses que se llama El Episcopio presenta… y que tiene mucho éxito de público.
R.- Hemos tenido cerrada la librería durante las tres peores semanas de la epidemia, para garantizar la seguridad de nuestros clientes y de nosotros mismos. Además de libros también vendemos prensa y papelería, por lo que no estábamos obligados a cerrar, pero preferimos hacerlo para evitar problemas. Desde que empecé en el negocio, nunca había tenido tanto tiempo cerrada la tienda. Aunque lo hemos tomado con resignación, ha sido muy duro para nosotros.P.- ¿Qué tipo de iniciativas y actividades vais a poner en marcha cuando todo se normalice?R.- Aunque parezca mentira, hasta ahora no hemos tenido nunca un club de lectura, fundamentalmente por falta de tiempo, el mal de nuestros días. Poco antes de que se declarara la pandemia, estábamos organizando uno, que ha quedado en suspenso por el desarrollo de los acontecimientos. En cuanto podamos, nos pondremos con ello, pero es posible que sea un club de lectura virtual.»También queremos potenciar nuestra página web atenealibros.es, que nos sirve de escaparate para dar a conocer nuestra selección de libros. Y seguiremos trabajando para establecer un contacto más directo y permanente con nuestros clientes, organizando sorteos que premien su fidelidad y les ayuden a divertirse con los libros. En los dos últimos años hemos organizado varias veces el juego El libro oculto, con muy buena acogida. Este juego consiste en dar cinco pistas sobre un libro y a partir de ellas averiguar cuál es; entre los ganadores sorteamos el libro. Pensamos continuar periódicamente con este juego, y crear alguno más esta vez destinado a los más pequeños.
P.- ¿Veis muy oscuro el sector del libro en toda esta vorágine?
R.- Nosotros somos optimistas en ese sentido. Creo que la crisis del coronavirus va a hacer que nos replanteamos las actividades de ocio y va a obligarnos a reestructurar el tiempo que dedicamos a cada una de ellas. La lectura es una actividad de ocio muy adecuada para los tiempos que se avecinan, además de económica. Tenemos la esperanza de que, junto con todo lo malo que nos ha dejado el COVID-19, que ha sido mucho, esta enfermedad nos deje algo bueno: un aumento en el número de lectores. Estamos seguros de que cuando alguien empieza a leer, ya no hay forma de pararlo, por lo que ese aumento en el número de lectores se consolidaría en el futuro.»Sin embargo, en nuestro horizonte optimista tenemos un nubarrón que nos preocupa y que tiene un nombre propio: Amazon. Los comercios de proximidad tenemos muy difícil competir contra una empresa de tal envergadura y, sin embargo, es de vital importancia que podamos hacerlo porque todos nos beneficiaremos de ello. Los barrios seguirán teniendo vida, se preservará el empleo en tiempos tan difíciles como los que se avecinan y no nos deshumanizaremos con un trato distante, aunque eficaz. En los últimos meses nos hemos visto privados del contacto social y hemos sufrido en nuestras carnes lo que esto supone. También hemos sentido la desolación de ver nuestros comercios cerrados y eso no nos ha gustado nada. Esperemos que cuando todo esto pase, no nos olvidemos de ello y recordemos que los pequeños comercios no solo nos proporcionan los artículos que necesitamos sino que también nos dan la oportunidad de tratar con otros seres humanos y de ver vida a nuestro alrededor.P.- ¿Cuáles son los libros o autores que más habéis vendido después del confinamiento?
R.- Estamos vendiendo muy bien A corazón abierto, de Elvira Lindo, Y Julia retó a los dioses, de Santiago Posteguillo, y La mansión, de Anne Jacobs. Antes y después, Almudena Grandes y su novela La madre de Frankenstein siguen arrasando.P.- Una curiosidad, ¿las editoriales hablan con vosotros para ver qué se vende más?
R.- No, no lo hacen. Quizá con librerías de mayor tamaño lo hagan, no sé. Con nosotros, no. Sin embargo, hay editoriales como Nórdica Libros, que es una editorial que nos encanta, que contacta con nosotros para informarnos sus novedades y mandarnos las reseñas que aparecen de ellas en los medios de comunicación. Valoramos y agradecemos mucho esa política de comunicación.P.- ¿Cuál ha sido la última anécdota graciosa que recordáis con un cliente?
R.- En los años que llevamos, ya tenemos muchas, pero la que más me gusta quizá sea la que muestra la impaciencia del lector. Hace unos años, cuando llegué a la librería, un 16 de octubre, me estaba esperando en la puerta un cliente que quería comprar la novela ganadora del Premio Planeta, que se había fallado la noche anterior. Cuando le dije que no la tendríamos hasta pasadas un par de semanas, se mostró muy decepcionado de tener que esperar ese tiempo para leer la novela de Dolores Redondo, que fue la ganadora ese año. En noviembre volvió y compró tres de golpe.P.- En vuestra web también tenéis una sección de escritores abulenses. ¿Nos podrías recomendar algún título o autor?
R.- Uy, esta pregunta es muy difícil, porque tenemos escritores de muy distintos géneros: novela costumbrista, novela romántica, biografía ficcionada, poesía, cuentos… Hay donde elegir. A los escritores abulenses lo que les sobra sin duda es talento. Eso bien lo sabe la Asociación Cultural de Novelistas Abulenses La Sombra del Ciprés, que ya tiene en su haber varias obras colectivas de gran éxito.
🔻🔻ENLACES RELACIONADOSWeb de la Librería Atenea
En: Calle de las Eras, 8, Ávila.TwitterFacebook