Me encanta este pequeño piso nórdico (46 m²) decorado con esta preciosa paleta de colores claros tan sutiles en blanco, crema, gris y beige. Todavía me gusta más que esté plagado de materiales naturales como el cáñamo, el ratán, el lino, el algodón y la madera.
Las decoraciones donde destacan estos materiales suelen resultar muy cálidas y acogedoras, de ambientes serenos que inspiran limpieza y una vivienda sana. Si añadimos plantas frescas y podemos disfrutar de mucha luz natural todavía se enfatiza más esa sensación, este mini piso tiene todo eso.
No se qué habitación me gusta más si el dormitorio o la cocina, las dos invitan a pasar ahí mucho tiempo, que no el saloncito, que está algo desangelado y necesitaría por lo menos otro sofá, una estantería y la tele ¿verdad? :)
Vía: 55kvadrat