Perdida de calidad en la sanidad publica? cuento mi pesadilla particular.

Hoy voy a contar mi experiencía en la sanidad publica, la cual defiendo, y que considero que mi experiencía particular se debe precisamente a los distintos recortes y privatizaciones que se han producido y siguen produciendose en el sector.

Había oido comentarios sobre mi hospital, del cual se dice que consultas genial pero cirugía fatal, pero mi experiencía inicial no fué mala, 2 operaciones en 2011, unos quistes en el parpado y una vasectomía, en ambos casos, el mayor dolor que sufrí fué precisamente la aguja de la anestesía, (para aquellos que no lo hayan vivido, te introducen una aguja la cual no quise ver, pero que por lo que metian, era enorme, en la zona a dormir, el dolor por la aguja es fuerte, pero luego llega una sensación como si te ardiesen los testiculos por dentro), despues de eso, ya no sientes nada hasta que en tu casa se pasa el efecto de la anestesía.

Ambas operaciones fueron un exito e indoloras por la parte que he mencionado, tambíen la cicatrización y el posterior seguimiento fue de lo más profesional, ninguna queja, excepto por el hecho, de que mis espermatozoides seguían circulando libremente por unas tuberías supuestamente cortadas.

Será porque mis espermatozoides son de Bilbo y usan txapela, será porque “haiba la ostía, el tubo cortado? pues me lo salto oyes!”, el caso es que los cabrones seguían circulando cual M-40 cualquiera.

Dos años después, los medicos llegaron a la conclusión de que mis tubos se habían vuelto a unir, (mira tú la naturaleza sabia ella que quería tocarme los coj… y nunca mejor dicho…), así que se programó la repetición de la misma.

Por otro lado, un quiste bastante hermoso se había formado en semana santa detrás de mi orjea, el cual se infectó y aunque me realizaron una buena limpieza, el grueso del quiste o quistes era imposible sacarlos sin cirugía.

Así que de repente me ví envuelto en dos operaciones nuevamente, pero esta vez con 2años de diferencía, eso sí, en el mismo centro.

Antes de continuar quiero dejar claro, que, en todo momento el trato del personal, tanto de los celadores, como enfermeros/as, medicos/as, etc… fué impecable, muy educados, muy atentos, pero por desgracía en cuanto a las operaciones en sí… no puedo decir lo mismo.

La primera fué la vasectomia y fué una autentica pesadilla, para empezar, cuando me llamaron dentro, me dí cuenta que el celador estaba tremendamente enfadado, al parecer con algun compañero, el caso es que la aguja para la sonda poco más que sale por el otro lado de la mano, no dejó de doler hasta que me la quitaron.

Una vez en quirofano, procedieron como la otra vez a clavarme las agujas para la anestesía, pero no sé si por fallo de la anestesía, (la aguja la sentí lo juro como dolía), no sé si por las prisas, no sé si porque pincharían en la parte del testiculo que no debían, no sé el motivo pero la anestesía no había hecho efecto cuando empezaron a cortar.

Alguna vez os han operado sin anestesía? en los testiculos? os podeís imaginar siquiera el tremendo dolor que es? noté cómo me cortaban, como agarraban, apretaban, cosían… lo note todo!

El medico al oir mis gemidos, me preguntaba si me dolía, al decirle que sí, rapidamente exigió anestesía, y otro pinchazo, una enfermera me cogió de la mano intentando distraerme y darme animos, y no sabe cuanto se lo agradezco, el medico estaba nervioso y preguntaba una y otra vez, ya no te duele verdad? a lo que yo respondía que “joder si dolía”, os lo digo, no es facil hablar con tanto dolor. El segundo testiculo se me hizo eterno, y eso que el medico iba con prisa, pues había pedido hacía un rato que le trajesen al siguiente paciente y estaba esperando ya en la puerta, al parecer tenían mucha carga de trabajo, eso es una de las cosas que pude entender aparte del dolor.

Tardé más de una semana en poder ir a trabajar y casi un mes en poder andar sin sentir dolor, que aun hoy a veces siento, según me comentó la enfermera de las curas, me habían hecho una carnicería ahí abajo, para asegurarse de que no volverían a unirse, eso sí, los puntos los pusieron bien, (tengo unas buenas rajas para demostrarlo), y han cicatrizado bíen.

Mil gracías a la enfermera que me dió la mano, si no hubiese sido por ella…

La segunda operación, fué la del quiste detrás de la oreja, esta en principio era sencilla, y he de reconocer que me había olvidado del día, estaba convencido de que era otro, así que cuando me llamaron del hospital, me asombré, me cambiaron la cita para las 13:00 horas puesto que ya había desayunado, así que me cogían en ultimo lugar.

Nuevamente todo el personal fue muy amable, y de hecho esta vez la operación fue genial, no me enteré de nada, es más, la enfermera hasta me hizo cosquillas poniendome los electrodos, (qué le vamos a hacer tengo cosquillas).

La anestesía hizo efecto, me quitaron no uno, sino dos quistes de detrás de la oreja, cosido y a casa, todo genial no?

Pues no

Esta semana, antesdeayer fuí a la cura en el ambulatorio para que me quitasen los puntos, la enfermera me comentó que me cosieron mal, dejaron demasiada apertura y simplemente la herida esta abierta, no ha cicatrizado.

Ahora estoy en lo que la enfermera llama 2ª disposición, o algo así, es decir, a ver si conseguimos que cicatrice a base de curas, según mi chica, tengo el corte abierto, y según la enfermera se puede infectar, así que…

Hasta ahora mi experiencía previa en este Hospital había sido estupenda, tanto en consulta como en quirofano como en urgencías, siempre he defendido a este hospital, a la sanidad Madrileña y a la sanidad publica por encima de todo, sé que este hospital tenía parte privatizada y que se enfrentaba a la privatización total, y sé de los nervios, luchas, huelgas y demás, que yo he apoyado desde el primer día.

Pero lo que es un hecho es que mi actual experiencia, ha sido un infierno, y que lo que a mí me ha pasado, no le debe pasar a nadíe más. Y por ello lo estoy denunciando aquí y ahora, la sanidad tiene que ser publica, y disponer de todos los recursos humanos y materiales necesarios para la calidad exigida, y eso se está perdiendo.

Valga mi experiencía personal como un llamamiento para que cambien las cosas y que la proxima vez que entre a un quirofano (y salga), todo lo que pueda decir sean excelencías.