Todavía estoy impactada con lo que vi hace unos días en el suplemento dominical de un periódico de tirada nacional, bastante conocido, por cierto. Claro que imagino que la culpa no la tienen los del periódico sino los que han redactado el anuncio. Aun así, yo no sé si me negaría a publicar en mi periódico algo como esto, porque sólo de verlo me dio sarpullido...
En fin, toda la vida pensando que este calzado se llamaba "abarcas" y ahora resulta que les han cambiado el nombre y yo sin enterarme...