Hace poco MantenloSimple escribió una serie de entradas hablando sobre el perfeccionismo, entradas en las que me vi totalmente reflejada. Y cómo buena perfeccionista, me planteé cual era la razón de qué lo fuera, para así poder saber cómo dejar de serlo.
Para empezar, creo que es más difícil perder la manía del perfeccionismo que ganarla. Es un hábito, una necesidad interna de hacerlo todo bien, o todo lo bien que tú creas que deberías poder hacerlo. De tener todos los frentes cubiertos y tener todas las posibilidades controladas. Por ejemplo, recuerdo salir de los exámenes en el instituto pensando que había hecho un examen penoso, y luego resultar que había sacado un notable. Podría haber estado mejor. Siempre podría haberlo hecho mejor. Creo que nunca he pensado que he hecho algo del todo bien.
Pero por qué? cuál es esa necesidad? de momento se me ocurren dos: no...