Hirayama trabaja limpiando los baños públicos en Tokio. Le gusta leer, la música de los 80 y los árboles, con los que tiene una bonita relación. Sus cenas en el mismo sitio, sus paseos en bici, los baños calientes, la visita a la lavandería, …, constituyen su vida y su mundo. El que él ha elegido transitar.
Con Perfect Days toma total sentido la afirmación de que menos es más. Una película sencilla, transparente, construida desde las pequeñas cosas, las de una rutina que también nos puede hacer felices si nosotros lo hemos elegido, como le ocurre a Hirayama.
Win Wenders cuenta muchas cosas en una película en la que al mismo tiempo parece que no pasa nada, pero en ese "no pasa nada" nos está hablando de muchas cosas.
Gran elenco destacando Kôji Yakusho y sus miradas y silencios. Una fotografía maravillosa para que Tokio también sea un personaje más.