-¿Pero cuanta gente sois de Checa?- me preguntaba un compañero de abono en la Plaza de Toros de Valencia - ¿es grande?- insistía.
Entrando a la Plaza nos encontramos a “medio pueblo”, cerca de nuestro abono habría unos 10 checanos. 19 de marzo, día grande de las Corridas Falleras y se lidiaban toros de Román Sorando, de Checa – Son paisanos de los de lo de GimenezIndarte – comentaron otros abonados de Algemesí – venimos de ver unos novillos para setmana de bous. - A Museros va uno de Jacinto Ortega y a Liria del Joaquinazo – apuntó otro aficionado que no daba puntada sin hilo.
Otro día, en un coloquio taurino con un matador de toros retirado, ahora torero de plata, Miguel Angel Marchal, me dijo - así que también eres “checano”, siempre he tenido muy en la cabeza ese pueblo – yo le dije -¿porque viniste con Imanol Sánchez a torear? – No, yo me hice torero en Barcelona, y allí coincidía con Luis García “Checanito”, para mi era un ejemplo – sentenció.
Este año, otra vez un milagro, en un pueblo que no llega a los 300 habitantes se va a dar una corrida de toros, otra vez ese día nos multiplicaremos por 6 o 7 y llenaremos la plaza. El día 25 de agosto son “los toros” de Checa, y lo sabe media España. Checa es conocida gracias a su condición de “taurina”.
Hemos sido un referente y lo seguiremos siendo, porque no se cuantos somos checanos, lo que sí que sé es que sabemos lo que somos. Por eso, este 25 de agosto repetimos la experiencia de hace dos años, ¡festejo mayor, corrida de toros!, en la que, entre otros, lidiará un checano, en la terna habrá un checano y todos rendirán homenaje a otro checano.