Nos dice el sabio Wikipedia:
Persuadir: Es el proceso de guiar a la gente y uno hacia la adopción de una idea, actitud, o la acción mediante significados racionales y simbólicos (aunque no siempre lógicos). Es una estrategia de resolución de los problemas que confía en "peticiones" más que en la coacción
Básicamente la idea es lograr que ellos deseen estar de acuerdo conmigo y aparte se sientan felices e inteligentes cuando lo hacen
Es cierto que nuestra especie aspira a convencer y ser convencido por los demás. Basta con echar un vistazo histórico a algunos de nuestros más grandes talentos: Moisés, Jesús, Buda, Mahoma, Sócrates, etc. Esta claro que ser el interlocutor de dios, o la amenaza de la condena eterna, o el regalo de la iluminación suelen ser fuertes argumentos a los que no podemos recurrir el común de los mortales, por lo que sin importar cuan buena sea nuestra idea o misión, o cuan persuasivo seamos es realmente difícil lograr la aceptación de un gran número de personas, todas al mismo tiempo.
Vamos a tener que hacer un trabajo de hormiga, “atacando” pequeños grupos o incluso individuos, de forma tal podamos aprender acerca de ellos, conocer sus intereses y creencias, para identificar y usar ese conocimiento como punto de apoyo para lograr adhesión y seguimiento de nuestras ideas.
Un error clásico que solemos cometer (yo lo hago muy a menudo) cuando tenemos que convencer sobre algo es centrarnos en nuestros propios intereses, deseos, puntos, olvidándonos por completo de la audiencia.
Hagan la prueba de escucharse y verán que repetimos más seguido de lo deseable el: yo quiero, yo deseo, yo necesito. Salvo que estemos hablando con el genio de la lámpara a nuestros interlocutores no los moviliza muchos lo que nosotros deseemos: (Estoy atrasado con las entrega de hoy, me pagan poco y mi mujer me engaña, Encima tengo que escuchar lo que este tipo “desea” )
Hacerlo de esa manera es como disparar a ciegas, o pero aun, es como dispararse. Creo que la posta esta en trabajar de manera opuesta, comprendiendo objetivos, creencias, forma de pensar y motivaciones de nuestros interlocutores.
El tema es que la mayoría de nosotros encuentra demasiado aburrido este asunto de interesarnos en los demás. Nuestro ego no nos lo permite
Que pasaría si practico la “generosidad de mente” y trato de ver y entender el mundo como “ellos” ? Las posibilidades de persuadir, de que mi idea prenda, crecen en forma espectacular. Y si no puedo convérsenlos, mis estudios de cómo piensan, junto con su refutación por mis ideas, me enseñan algo nuevo acerca de su visión de las cosas. Como mínimo, su contra-argumento me dará nuevos conocimientos que me va a ayudar la próxima vez tenga que convencerlos, o alguien más.
Obviamente es indispensable que yo crea en mi mismo y mi idea de otra forma es muy difícil de transmitir naturalmente la convicción necesaria.
Por ultimo Nadie quiere ser convencido por Terminator. Tiene que haber algo de espacio para la conversación para progresar y evolucionar. Hay momentos en que, a pesar de la cantidad de tiempo que hemos dedicado a preparar y creer en una idea, lo más sabio es reconocer que no es la mejor idea o no es el momento adecuado. Hay que tener huevos para admitirlo pero indudablemente ganaremos en credibilidad y nos será de gran ayuda la próxima vez que necesitemos vender una idea