Revista Humor
A pesar de las tisanas bien cargaditas de Tranquimazín que le
prepara María Dolores y del tratamiento de Demoscopina - Supo-
sitorios recetado por el Dr. Arriola, don Mariano sufre pesadillas que
no le permiten conciliar el sueño.
En la más recurrente de ellas, se ve al líder de la oposición llegando
descompuesto a una estación de ferrocarril, después de haber pasado
por multitud de vicisitudes y sobresaltos. Se dirige angustiado a la
ventanilla para solicitar su billete reservado para La Moncloa y un
ridículo funcionario le informa, entre carcajadas, que el último tren
acaba de salir y el próximo efectuará su salida en el año 2016.
Ante la desoladora escena, un guardia asturiano se acerca a María
Dolores para informale que, si se da prisa, el caballero aún puede
coger el Rápido a Santa Pola que efectuará su salida en
breves instantes.