El Museo Postal y Telegráfico se trasladará próximamente de Madrid (Aravaca) a Toledo. Se trata de un curioso museo donde no pueden faltar las matemáticas, desde los sellos a la telegrafía en código morse con sus puntos-rayas que no es otra cosa que la base 2 de numeración que Leibniz y Caramuel tomaron del I-Ching chino.
A falta de conocer las nuevas instalaciones, el museo madrileño se ordena en distintos espacios temáticos. Nos interesan aquellos que recurren a los números con frecuencia como pesos y códigos.
Nos detenemos en especial en la sala dedicada a la telegrafía que muestra desde sus inicios con el telégrafo óptico a la evolución posterior por cable y radiofrecuencia. Echamos en falta alguna referencia a los diseños de Agustín Betancourt, telégrafo pionero y malogrado.
La restauración de algunas torres ópticas como las de Arganda y Adanero nos animan a conservar uno de los patrimonios que muestran el tejer y destejer de un país que lo intentaba… ¡pero llegaba tarde!
Sobre las torres: https://mateturismo.wordpress.com/2015/04/13/las-torres-del-telegrafo-optico-en-pancorvo/