Pete y Pete: La banda de sonido de tu vida (Hard Day’s Pete)

Como bien dice su hermano mayor, Pete (menor) tiene su olor favorito, su estrella favorita y su órgano interno favorito. Pero no tiene una canción favorita. Cosas de la vida, el capítulo en que la encuentra es uno de los más memorables de esta increíble serie.

Concretamente el episodio se llamó “Hard Day’s Pete”, traducido estúpidamente como “La canción de Pete” (sí, tiene relación pero no va al quid de la cuestión) y relata el momento cúlmine, celestial, en que Pete descubre por total casualidad una canción que le va a volar la cabeza y, tras la cual, nunca va a ser el mismo. Lo interesante de Pete y Pete era que trataba historias pequeñas de la vida cotidiana con un humor absurdo y a la vez profundo, que la convirtió en una de las serie más extrañas y personales de la era Nick de los 90.

Recordemos que en el capítulo de esta canción, se presentaba por primera y única vez a la banda Polaris en pantalla. Un grupo de rock-collage de varias bandas independientes de la escena local que se unieron única y exclusivamente para grabar el opening de esta fabulosa serie y varias de las canciones que cerraban sus capítulos o que acompañaban a modo de let motiv algunas cuantas escenas igual de memorables. Hace algún tiempo, en este mismo blog hablamos sobre Polaris y desde ya los invito a escuchar su único disco “Music from the adventures of Pete and Pete”. Su estilo tiene inherentemente que ver algo con esa rabiosa adolescencia yanki a lo road movie. De alguna forma, escuchar este disco me retrotrae directamente a la película “Almost Famous”, será por ciertos puntos de contacto entre el rock naciente y la adolescencia, yo no sé.

Pero volviendo en concreto a “Hard Day’s Pete”, fue emitido en enero de 1994 bajo al dirección de B.K. Small, con guión a cargo de Will McRobb, Chris Viscardi.

Todo comenzaba con una de esas escenas que pintan todo lo entrañable de la serie: Pete (menor) tiene su propia estación de radio barrial hecha a partir de un walkie talkie con el botón hundido. Junto a Archie (su super heroe privado), realizan un típico show radial de trasnoche -aunque es durante el día- en el que Pete humilla a sus oyentes cuando le piden una canción. Interiormente, Pete está buscando esa canción que lo defina, que lo cambie para siempre. Y mientras va por las calles de su norteamericano barrio con tiempo de descuento para llegar a clase, se encuentra casualmente con una banda anónima que canta el mejor tema que escuchó en su corta pero intensa vida: Summerbaby.

Pete queda maravillado, aunque se va pedaleando y, cuando quiere darse cuenta, de su canción favorita sólo le queda el recuerdo de una melodía cada vez menos palpable y “trozo de plástico”. Ahí comienza la costumbrista y a la vez épica búsqueda de Pete de reencontrarse con SU canción, de la cual no quedan registros en ningún lado.

El capítulo, que les dejo a continuación en inglés y en castellano, es además un repaso enorme por las excelentes canciones de Polaris. La banda que Pete y la Humanidad perdimos.

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