Revista Literatura

Philip Larkin, Las bodas de Pentecostés y otros poemas

Por Griseldagarcia
Philip Larkin, Las bodas de Pentecostés y otros poemas

Philip Larkin


Dinero


Cada tres meses, el dinero me reprocha:

¿Por que me rebajás a lo inservible?
"Yo soy el sexo y las cosas buenas que podrías tener.
Estás a tiempo de remediarlo, firmando algunos cheques".

Entonces me comparo con los otros:

No lo descuidan ni locos.
Tienen casas, coche y esposa:
evidentemente lo aprovechan mejor que yo.

Sin duda el dinero y la vida tienen relación,

no podés mantenerte joven hasta jubilarte
y por más que ahorres en el banco
al final no te alcanzará ni para afeitarte.

Escucho el canto del dinero. Es como

mirar a la distancia un pueblo de provincia:
barrios, canales, iglesias lujosas y locas
bajo el sol de la tarde. Triste, muy triste.


El versito


Te cagaron lindo tus viejos

sin querer, pero te jodieron.
Ligaste todas sus taras
más alguna extra para vos.

A ellos también los cagaron

viejos tontos planchados
que vivían como momias
o saltándose al cuello.

Heredamos la miseria

como caracoles marinos.
Tratá de zafar a tiempo
y ni pienses en tener hijos.
Philip Larkin (Inglaterra, 1922- 1985), Las bodas de Pentecostés y otros poemas. Traducción: Santiago Espel. La Carta de Oliver. Buenos Aires. 2014.

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