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La pieles grasas presentan ciertas señales como, poros dilatados, puntos negros, brillos y aspecto graso.
Existen diferentes causas y factores que pueden provocar exceso de sebo en el rostro: desequilibrio hormonal, herencia genética, edad, tiempo, nutrición y modo de vida, entre otros muchos. Lo idóneo para poner punto y final a esta clase de inconveniente es desenmascarar la causa a través de un diagnóstico en profundidad y continuar un tratamiento concreto.
En el momento de adquirir productos cosméticos para esta clase de pieles, es esencial que no agreguen más grasa. Un producto inapropiado puede ser realmente perjudicial puesto que aparte de empeorar el aspecto graso inmediatamente, obstruye los canales de salida de las glándulas sebáceas, y empeora el asunto de base.
La piel grasa se identifica por tener un aspecto oleoso, así como por la formación de brillos en la zona T del semblante, la presencia de granos y puntos negros. Es un género de piel con alta tendencia a poseer acne, el que se genera por una excesiva acumulación de sebo en ciertas partes de la faz. Por todo ello, la piel grasa requiere un tratamiento concreto que controle la aparición de todos estos síntomas y mejore su aspecto.
La piel grasa se distingue por su mayor grosor, la dilatación de los poros y el exceso de secreción sebácea. Si consideramos su aspecto, resulta untuosa, húmeda y refulgente, y se aprecian frecuentemente puntos negros ,o bien espinillas, debido a la tendencia natural a la formación de impurezas tan característica de esta clase de piel.
No obstante, no todo es negativo, en tanto que la piel grasa envejece de forma más lenta y, por ende, sostiene un aspecto joven a lo largo de más tiempo. Además de esto, es más resistente a los efectos negativos ocasionados por las agresiones externas, como el viento, o bien el frío.
CREMA HIDRATANTE
Una vez derruido el mito de que las pieles grasas no precisan hidratación, es preciso escoger apropiadamente el producto hidratante para eludir que aporte más grasa.
Una opción alternativa que marcha en especial bien en este género de pieles son los sérums ,o bien las ampollas. Las pieles grasas no precisan una hidratación incesante. Basta con aplicar crema hidratante de noche, que es cuando mejor se regenera la piel. Ya antes del maquillaje, lo más recomendable es emplear un sérum regulador de la grasa.Recomendamos los de la marca Secretos del Agua.
LIMPIEZA
La limpieza es uno de los hábitos más esenciales para sostener la piel sana. Si bien nos desmaquillamos al final del día, es preciso repetir la limpieza en profundidad por la mañana, para retirar el exceso de sebo que se genera a lo largo de la noche.
En el momento de seleccionar desmaquillante, las aguas micelares y los jabones con aséptico, en especial en pieles con tendencia acneica, son buenas opciones.
En el tratamiento de la piel grasa es esencial efectuar una limpieza facial tanto por el día como de noche. Para esto, escoge un gel concreto para pieles grasas de alta calidad. Los productos más indicados son los que se aclaran con agua. En primer lugar, debes humeceder el semblante y aplicar el producto con movimientos circulares y suaves. Insiste en la zona de la nariz, la barbilla y la frente que es donde se amontona más grasa. Después, aclara con mucha agua.
Si bien la piel grasa requiere de este hábito de limpieza, es recomendable no abusar del empleo de jabones, pues resecan la piel y esta segrega mayor cantidad de grasa.