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Existe la creencia errónea que cuantas más horas duerme una persona, menos calorías gasta y más grasa acumula. Esto se basa en que siempre hemos oído que durante el sueño permanecemos inactivos y no quemamos calorías, pero esta idea es falsa, porque aún en estado de reposo, el metabolismo necesita energía para mantener las funciones más básicas.

Luchar contra los kilos de más no es fácil, más en el caso de las personas con un ritmo de vida trepidante.

Para estas personas, existen una gran cantidad de reglas a cumplir y recetas variadas que aseguran la saciedad y ayudan a adelgazar si se precisa.

Quema calorías durmiendo.

Otra buena noticia es que se puede adelgazar hasta durmiendo.

Esta demostrado que un buen sueño ayuda a quemar casi 800 calorías.

Durante el sueño, cuando el organismo esta relajado, muchos procesos metabólicos se desarrollan mejor y con mas rapidez.

Los mismos estudios revelan que la falta de sueño tiene efectos sobre el equilibrio hormonal, viéndose afectada tu silueta. Se trata de dos hormonas : Leptina, producida por las células grasas y responsable de la sensación de saciedad y la grelina, producida por el sistema digestivo y que es la responsable de la sensación de hambre.

La falta de sueño hace bajar el nivel de leptina y aumenta el nivel de grelina. Es cuando tu nivel de energía es muy bajo y tu organismo te pide alimentos ricos en calorías, como los dulces.

Por primera vez, tenemos evidencias de que el número de horas de sueño puede marcar diferencias en el resultado de una dieta de adelgazamiento

asegura Plamen Penev, director del estudio efectuado en la Universidad de Chicago .

Añade que si tu objetivo es perder grasa, saltarte horas de sueño es como pinchar las ruedas de tu bicicleta.

Conseguir un descanso adecuado ayuda y estimula concretamente la capacidad del organismo para quemar grasas, ya que durante el sueño el cuerpo metaboliza carbohidratos para transformarlos en energía.

La falta de sueño o el dormir poco interfiere con este importante proceso metabólico y como consecuencia se acumula grasa en el cuerpo.

Además la privación del sueño hace que aumente el nivel de cortisol, la hormona del estrés, que influye en tener un mayor antojo de carbohidratos y alimentos ricos en calorías.

Hacer ejercicio físico influye en tener un sueño profundo y descansado, ya que el ejercicio hace bajar el nivel de hormonas responsables del estrés y relaja al cuerpo. Esto significa un mejor descanso y se consigue un mayor metabolismo para quemar las grasas.

No sólo se trata de cuántas horas duermes, también de la regularidad.

A pesar de que la cafeína puede disminuir ligeramente tu apetito, también es un estimulante que evita que duermas bien y que descanse de una manera efectiva. Una forma fácil de mejorar la calidad del sueño es reducir el consumo de cafeína.

VIDEO - 3 trucos para perder barriga sin ejercicio: Quema grasa adbominal durmiendo

Además, hay alimentos que te ayudaran a perder peso mientras duermes y para esto tienes que "confeccionar" tus cenas teniéndolas en cuenta.

No tenemos que acostarnos con hambre para no afectar el descanso.

Pero... ¿cómo es posible que una comida ayude a bajar de peso?

Fácil: el esfuerzo que tiene que hacer el cuerpo para asimilar uno u otro grupo de alimentos hacen que engorden más o menos, incluso que ayuden a adelgazar.

Dormir bien ayuda bajar de peso

El doctor Pierre Dukan lo explica así :

Si consumes 100 calorías de azúcar para el café, el cuerpo sólo emplea siete calorías para asimilarlo, así que para ti quedan 93 calorías. Si tomas 100 calorías de mantequilla, al cuerpo le cuesta 12 calorías, así que tu organismo asimila 88. Sin embargo, para asimilar 100 calorías de proteínas puras -clara de huevo, pescado magro, queso blanco...- tu cuerpo hace un trabajo mucho más costoso, de unas 30 calorías, así que deja al organismo nada más que 70.Además, las proteínas quitan mucho el apetito y ayudan a eliminar los líquidos acumulados

Algunas están indicadas para usar antes de dormir. Durante la fases de sueño profundo se activan unos mecanismos implicados en la mejora de la receptividad cutánea, la lipólisis y la mejora de la circulación, contribuyendo a la acción intensiva del producto.

Tampoco hay que hacer ejercicios inmediatamente antes de ir a la cama: lo ideal es dejar pasar unas tres horas. Podemos incorporar nuevas rutinas que estimulen la relajación del cuerpo, como un buen baño. También leerantes de dormir ayuda a despejar la mente y a conciliar el sueño.