Pinocho:un niño llamado Esteban.

El hogar constituye el primer medio  a transitar por un niño ,en el dará sus primeros pasos en todos los sentidos; por lo cual,los padres somos responsables del hombre o la mujer que entregamos a la sociedad.Lo que vivan junto a nosotros durante todos esos años , es la base sobre la que construirán su propia familia .Los jovenés no son solo el reflejo de la sociedad sino de los padres  y cuánto influyó en ellos el entorno donde crecieron , se lo harán saber a sus compañeros y a sus pofesores a traves de su buen o mal comportamiento.Nunca debe ser suficiente cuando de educar  a nuestros hijos se trate;cualquier error, por simple que te resulte , puede ser en el futuro la raíz de todos  sus males.

“Pinocho se había vuelto un niño de verdad;  ahora se llamaba Esteban. Tenía quince años, usaba pantalones mezclilla, tenis  de marca y una mochila Marvel; pero a este Pinocho no le crecía la nariz. Su amiga imaginaria a quien llamaba, Hada Azul,según él,le tomó tanto cariño, que le enseñó varios trucos para ayudarlo a  justificar sus mentiras y parecía tener algún tipo de influencia sobre las personas; porque no le crecía la nariz .

El amigo de la infancia,Pepe Grillo, se marchó; porque gracias a los videojuegos la conciencia de Pinocho se hacía  tan pequeñita , que no cabía ni un solo consejo.

Para colmo , escuchó en la televisión  que si sembraba al Hada Azul en el campo de la Internet ,le crecería una nueva conciencia; pero solo consiguió arrancar su poca imaginación de raíz.

Entre una cosa y otra  nadie estaba al pendiente de Pinocho  y lo peor estaba por venir.

Un grupo del barrio  siempre andaba haciendo cosas incorrectas y dado a los problemas de razonamiento por los que estaba pasando Pinocho, decidió unírseles.

Solo tenía que  faltar a la escuela, tomar el dinero  sin pedirlo y molestar, de vez en cuando, a las personas mayores ;así tendría su propio piquete y un lugar donde nadie  le diría que hacer.

Un  día llegaron con algo  que les dió un amigo, asegurándole que si lo tomaba, no existirían los problemas,que viviría en el mundo que soñase sin pensar en la escuela; podía olvidar esa preocupación por un futuro que no alcanzaba a comprender.Parecía un deseo cumplido para alguien que ya había sido marioneta .

Esa noche Pinocho no durmió en casa. A la mañana siguiente cuando despertó no se movía,por más que intentó, no se movía; era como si se hubiese vuelto de madera.

En ese momento recordó a su conciencia,tan pequeñita, que solo le alcanzó para pedir un deseo y como su Hada Azul había perdido su papel en la historia solo yo, pude escucharlo:

-” por favor… no quiero ser de nuevo una marioneta…”

-Lo siento Esteban… los escritores solo contamos historias.”

“Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud,antes que vengan los días malos y llegen los años de los cuales digas:

No tengo en ellos contentamiento…;”(Eclesiastés 12-1)