Los grandes sufridores del verano...los pies. La sequedad hace que todos los cuidados que les hayamos podido dar en invierno parezcan desaparecidos en combate! (jajaja) y el calor hace que se hinchen, que cualquier simple paseo se convierta en las consecuencias de una caminata y que estén pesados y doloridos.
Hoy vamos a ver en un "penta-consejo" muy fácil como disminuir estos "daños colaterales" del verano, ¿les parece?
1. Mantén a ralla las durezas Yo utilizo dos maneras básicas (y complementarias) de hacerlo, que seguro conocéis:
- Métodos más agresivos: O lo que es lo mismo, la Sra. Piedra Pómez, conocida desde el principio de la humanidad! Lo cierto es que no la uso a diario porque (al menos yo) si consigo ser constante con todo lo demás no la necesito, pero cuando me he despistado, si se acumula piel muerta es la mejor forma "doméstica" de deshacernos de ella. En el mercado hay multitud de versiones en cuanto a "diseño" (la comodidad a la hora de usarla es muy importante) y grado de "dureza" (si la piel de nuestros pies es fina, es mejor no usar una demasiado abrasiva). Además se puede utilizar en seco, para casos más "avanzados" o en la ducha, a modo de exfoliación.
- Métodos más suaves: que yo entiendo más bien como "de continuidad". Si no tenemos durezas muy marcadas, un exfoliante para pies y una crema específica para tratarlas nos será suficientes. El año pasado probé la del Mercadona,que no me gustaba porque tenía los gránulos muy grandes (y continuamente me hacía pensar que un día me mataba en la ducha, de lo que resbala, la joía) y ahora me va mejor con esta de Dr. Scholl. Como veis, la crema específica para durezas es de la misma marca. Yo la aplico por las mañanas, tras la ducha y solo en los sitios más propensos a las durezas (talones y la parte de la planta donde apoyamos todo el peso al llevar tacones).
Imágenes de web, por tanto.
2. Ataca a la sequedad También lo hago de dos maneras:
- Hidratación suave: La que aplico por las mañanas, cuando salgo de la ducha, no uso un producto específico sino que con la misma hidratante corporal hidrato también la piel de los pies. Al menos, así no se ve tensa y seca que es algo que sucede con el agua y el calor que va a venir luego, a lo largo del día.
Eso sí, cuidado con las chanclas (especialmente Salander y servidora jajaja).
- "Nutrición": cuando llega la noche y tenemos los pies agotados del día, es un momento que me encanta. Hay en el mercado un chorrazo de productos específicos...pero este año no he comprado ninguno, sino que estoy aprovechando aquéllas hidratantes corporales que tenía por casa y que no usaba por ser demasiado densas. Una buena capa (no tanto que no se pueda absorver, ojo!), un buen masaje llegando a las piernas, y al dia siguiente, pies de bebé.
Un poquito de color y una pegatinilla graciosa, y nuestros pies lucen más salaos, más alegres, de otra manera... ¿Y vosotras, como cuidáis vuestros pinrelines? Un besazo!!