Avanzamos en el mes de Mayo, y reticentes del calor o de los días previos al verano, toca coger inspiración para futuros proyectos. Ideas que darán forma o como no, inspiraran para crear nuevos conceptos. Y es que las tendencias y las modas evolucionan, y muchas veces lejos de arriesgar, nos quedamos con lo mas seguro, y con lo que nunca falla. Pero ¿nos atreveríamos a pintar la pared de dos colores o de bajar visualmente el techo de un espacio muy alto?
Pues si, hay que arriesgar y ser diferentes.
Apostar por lo que se sale de lo que estamos mas acostumbrados a ver, y con ese sello e identidad que dará vida a nuestra casa o negocio.
Hoy por eso, en ese concepto de diseñar el espacio, pero sin renunciar a lo arquitectónico y al riesgo, nos adentramos en este pequeño apartamento que denota minimalismo, modernidad y donde la visual se compone por el contraste horizontal de color intenso en la parte superior.
Los colores intensos y con ese toque decadente, son tendencia en decoración. Contrastan van perfectos con infinidad de estilos, y nos permiten contrastar y pintar las paredes de formar diferentes.
Una idea poco habitual, que hace que nuestro ojo se sienta engañado y nos de la sensación de que el techo esta mas bajo, haciéndonos mirar dos veces para encontrar el contraste.
Pero no se si me gusta mas esa idea, o como se mimetiza y casi oculta el dormitorio de la entreplanta donde la luz (con su foco tan detallado) y las plantas, le dan ese toque romántico con el que se acompaña el floron y moldura del techo.
Magistral, sencillo y sobre todo… atrevido.
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