La noticia de que cuatro personas de Vigo acaban de ser detenidos por tentativa de homicidio de dos porteros de un club nocturno sería una más de las que se dan sobre lugares así, entre alcohol, drogas y prostitutas, si no fuera que son líderes sindicales que actuaron aplicando sus derechos habituales como piquete informativo en día de huelga.
Los porteros quedaron gravemente heridos por arma blanca, uno de ellos en coma. Los sindicalistas fueron detenidos gracias a la grabación de sus imágenes en las cámaras del establecimiento.
Los cuatro líderes del metal de CC.OO. pretendían entrar gratis en el club nocturno el pasado día 24 tras preparar una huelga general convocada en algunas comunidades para tres días después. Estaban con la cabeza caliente de quien tiene poco que hacer.
Muchos sindicalistas viven en permanente huelga, liberados de trabajar, y dispuestos a formar piquetes informativos espontáneos y violentos.
Una actitud visible durante numerosas luchas sindicales, y una de las causas del descrédito de estas organizaciones gobernadas generalmente, en especial en la industria pesada y en las empresas públicas, por bronquistas. Nada de entrañables “Lunes al sol”.
Así que los cuatro de Vigo formaron un piquete para divertirse como cuando, en días de huelga, hacen cerrar comercios o rompen los establecimientos, o entran en bares a exigir consumiciones gratis y requisar jamones.
Querían hacer algo similar entre prostitutas siguiendo la técnica de la entrada en los lugares para gozar de ellos sin pagar.
Pero los porteros se opusieron, por lo que nuestros héroes tuvieron que aplicarles la lógica contundencia sindical contra los esquiroles.
Así de simple: los piquetes están envalentonados, con matones modelo kaleborroka, y sus sindicatos, entre tanto, llevándose comisiones por los ERE, por los cierres de empresas y por someterse a Zapatero.
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SALAS había previsto los pactos hace tiempo: