Revista Cultura y Ocio
Piso para dos de Beth O'LearyAutoconclusivo | Suma de letras | 448 páginas
Añádelo a Goodreads Tiffy Moore necesita un piso barato, y con urgencia. Leon Twomey trabaja de noche y anda escaso de dinero. Sus amigos piensan que están locos pero es la solución ideal: Leon usa la cama mientras Tiffy está en la oficina durante el día y ella dispone del apartamento el resto del tiempo. Y su modo de comunicarse mediante notas es divertido y parece funcionar de maravilla para resolver las vitales cuestiones de quién se ha acabado la mantequilla, cuántos cojines son demasiados y si la tapa del váter debería estar subida o bajada. Claro que si a eso se añaden exnovios obsesivos, clientes exigentes, hermanos encarcelados por error y, lo más importante, el hecho de que aún no se conocen, Tiffy y Leon están a punto de descubrir que lograr la convivencia perfecta no es fácil. Y que convertirse en amigos puede ser solo el principio...
★★★★★
Llevo un tiempo queriendo leer Piso para dos -un mes vaya, no creáis que desde que se publicó- porque lo vi un par de veces recomendado y, aunque cuando salió no me llamó naaada la atención, ahora me atraía un montón y me alegro mucho de haberlo leído porque me ha encantaaaaaaado.
Nos encontramos ante una historia sobre dos jóvenes que comienzan a compartir un piso y cama -porque el piso es más bien pequeño, solo tiene una habitación y una cama de matrimonio- pero no se conocen personalmente hasta casi la mitad del libro así que es una historia de inicio bastante atrayente y original y después empiezan a intercambiar post-its y los conoces y te enamoras de ellos y esperas por el momento en el que se encuentra y FANGIRLEO MÁXIMO CUANDO SE ENCUENTRAN PORQUE NO HAY MEJOR ESCENA QUE ESA. Espera que sí, que lo mejor es que hay escenas al mismo nivel y es ahí cuando le tengo que dar 5 estrellazas al libro porque he vivido mucho y me quiero casar con este libro.
Tiffy es una mujer que es la alegría de la huerta. Es de esas que van con colorines y hablan por los codos. Es muy simpática y transmite muy buenas vibraciones. Me gustaba mucho leerla porque es una persona muy activa y con un punto de impulsividad que alegraba el día. El contra que hay de su lado, su drama particular, es el ex, con el que tuvo una relación increíblemente tóxica que ella no supo ver y bueno, a lo largo del libro se va viendo su evolución, como llora por él, como se va dando cuenta de la manipulación y como al final le planta un par de ovarios. Tiffy es una mujer que en un inicio parecía que se comía el mundo con su increíble actitud pero que se pasa al mundo más humano y personal cuando empiezas a ver lo que ha sufrido. A pesar de todo sigo con la imagen de una Tiffy que alegra el día a cualquiera y, aunque tiene momentos de bajones, es una autentica valiente.
Leon es un hombre bastante introvertido, de esos que habla más bien poco y cuando contesta a los post-its de Tiffy, mientras que ella escribe una nota interminable, él se dedica a ir más al grano y no transmitir tanto. Sin embargo, Leon me ha gustado desde el inicio porque es justamente todo lo contrario de la vida que es Tiffy. Es un buen hombre al cual le gusta su calma y su rutina. Es fácil caer un poquito rendida a sus pies porque es un buenazo y de esas personas que es más de acciones que de palabras así que aunque no dice mucho los gestos empiezan a ganar y ganar hasta que llegan a un punto excesivamente top. Leon es un hombre de confianza, un auténtico encanto super inocente y toda una monada. Pero es que además hay un momento en el que se permite ser más impulsivo y LA PERFECCIÓN, SEÑORAS. Estoy enamorada de este hombre, no es ningún secreto.
Pero lo mejor de este libro ha sido el contraste que se generaba entre un personaje y otro y como poco a poco la química va naciendo porque es que son tal para cual. Ella habla hasta por los codos, él es de los que piensa más qué decir y no se confía tanto, ella es la impulsiva y él el de la rutina y juntos son la explosión en estado puro, se complementan de una forma maravillosa, resultan un gran apoyo el uno para el otro y acaban cogiendo lo mejor de cada uno. Ella hace que él cambien, que se aventure más y él es el mayor soporte que Tiffy pueda tener porque le da justo lo que necesita. Perfección, mucha perfección y mucho fangirleo. Pero es que además también son muy divertidos. Tiffy muestra su lado humorístico más fácil por su personalidad social y Leon parece que no pero también suelta algunos comentarios -cuando Justin se presenta la última vez, lo que le suelta, morí de risa!- que BUAH, BUENÍSIMO.
Y no he terminado porque ains, qué cosita más cuqui tenemos aquí. Los personajes son un encanto y cuando se juntan preparaos porque vais a morir de amor. La historia te engaña y te va metiendo poquito a poco hasta que ya no hay forma de escapar de una de las mejores historias de amor que he leído en mi vida. Es la cuquisidad personificada pero sin ser empalagosa ni tampoco tirar al drama, ¡es perfecta! Da bastante jueguito al inicio de que estén compartiendo cama, el rechazo de cada uno hacia al otro al inicio, como se van conociendo y soltando poco a poco a través de notas sin verse nunca y mientras se alimenta el ship y mueres porque llegue al fin el momento en el que se encuentre y de repente llega, que además sabes que estás llegando ahí porque se huele, se eleva toda la tensión y AAAAAAAAAAAAAAAH. Me ha encantado esa escena, es de mis favoritas pero es que además, como dije al inicio, hay varias a su nivel. Morí de puro fangirleo cuando se conocieron y cuando empiezan a quedar y cuando se apoyan y se emocionan y el final, EL FINAL ES DEMASIADO POTITO.
Dejando un poco de lado a estos dos porque realmente no sé por donde parar -es que omg, como puede ser todo tan cuqui y tan bonito y tan romántico y divertido y perfecto y maravilloso y añsldfkjañlsdjfñkasdfñlk- también hay más cositas de transfondo que realmente le han dado forma a la historia. La verdad es que me ha sorprendido un montón, y para bien, por donde va tirando la historia porque se mete en unos temas algo más complicados pero los trata super bien y me vuelvo a enamorar de todo el positivismo del libro. Y lo dicho, dramita sin excederse. Por una parte tenemos que Leon trabaje en un hospital en cuidado paliativos por lo que hay a un enfoque algo crudo pero se trata con muchísima energía positiva y Leon es un sol. Además sumamos las relaciones tóxicas y el maltrato psicológico, tema por el que temí bastante pero me quito el sombrero por lo bien que lo ha llevado. Por último habla de justicia por la parte del hermano de Leon, que fue condenado a prisión durante 8 años por un delito que no cometió. Y por encima de todo habla de amistad, de confianza, de amor, de apoyarse y superar las cosas juntos. Es todo muy emocionalmente bueno con este libro.
Hablando de apoyos, especial mención a los amigos de Tiffy, que son un auténtico apoyo emocional. Cada uno tiene un punto propio, está el psicólogo calmado y más callado, la tal vez excesivamente directa y robótica abogada de la que me hago muy fan y la compañera del trabajo que es un "con lo que decidas te apoyo" y es muy divertida también. Son personajes que están ahí para servir de apoyo pero que también se hacen un huequito en la historia. Otra que aparece es Holly, una paciente de ocho años de Leon que es más espabilada que él y sale con unas cosas que FAN. Y por último Richi, el hermano de Leon que me ha encantado demasiado y del cual quiero libro porque su carta fue preciosamente descoronazadora y el momento final que tiene es Wooooooow. Este hombre es también bastante perfecto y me he quedado con ganas de tenerlo más.
A Justin ni lo menciono, es el personaje perfecto para odiar. Un manipulador que la autora ha sabido plantar a la perfección y que aunque no me guste especialmente, la autora lo ha hecho bastante bien creándolo. Pero ya, este hombre es caca de la buena.
Piso para dos es un libro que me ha sorprendido muchísimo no solo por tener una de las historias más cuquis jamás contadas sino porque es divertida, trata temas peliagudos de buena forma y deja unos mensajes de amistad, amor y apoyo que dejan el corazón muy blandito, además de tener momentazos. Es un libro que te mete de lleno en la vida de estos personajes y que poco a poco te va cogiendo hasta que acabas con lágrimas en los ojos y deseando volver a leerlo porque es todo demasiado bonito.