Hoy llevé mi niña al colegio y me quedé observándole pues aunque no me da pena decirlo, me cuesta dejarla y marcharme, pero como tenía un poco de tiempo, desde la puerta le contemplaba. Ella que no sabía que yo estaba ahí, se quedó sorprendida cuando escucho mi voz desde afuera decir Micaela eso no sea hace…pues le estaba sacando la lengua a un compañero de clases. Micaela, se sintió avergonzada y se refugió bajo una mesa. Me acerque a ella y le explique que debía cuidar a los compañeros y que yo le quería, pues no deseaba que se quedará triste. Al final no sé si hice mal o bien, pues en esto de ser padre las normas cambian mucho, creo depende la personalidad de cada uno.
Según el cita Vallet,Maite. 2005. Cómo educar a mi hijo durante su niñez:155.
- Les regañamos, nos enfadamos, a veces empleamos malos modales también nosotros.
- Pasamos por alto sus conductas inadecuadas. Con frecuencia nos convertimos en cómplices de esas conductas, como sucede cuando les hacemos caso tras llamar nuestra atención a gritos.
¿Qúe deberíamos hacer?
- Dialogar con nuestros hijos para que descubran cómo convivir a gusto con todos, conocidos y desconocidos.
- Hablar con ellos, sin prisas, con tranquilidad.
- Reflexionar sobre la necesidad de respetar las normas de convivencia, que implican un trato amable hacia los demás.
- Definir claramente las normas a respetar o cómo deben actuar: “pedir permiso para pasar”, “Esperar a que entren los que estaban delante”, “Hablar, no gritar”.
- Ayudare con límites, y con consecuencias si fuesen necesarias.
- Mostrarle nuestra satisfacción, a medida que consiga mejor su convivencia.
- Animarle siempre a convivir utilizando buenos modales