Placas solares, prácticamente un delito

Sigue la persecución

Llega un momento en el que a uno le entran ganas de irse de este país ridículo en el que no pasa un solo día sin que aparezca una nueva prohibición, una subida de impuestos, un recorte, una nueva amenaza encubierta, una bajada de derechos, o una combinación de dos o más factores de los antes mencionados. Lo de las placas solares es un buen ejemplo de ello. ¿Se acuerdan de lo del peaje de respaldo? Luego se comentó que quizás no se aplicaría, pero la cosa no quedaba muy clara.

Lo que sí que está claro es que van a por ello, existe una persecución real a las placas solares que uno pueda tener para generarse su propia electricidad, y la persecución se está realizando de tal manera que da la sensación de que tener placas solares sea un verdadero delito, como si estuviéramos robando petróleo de una refinería.

Vengo a decir todo esto porque existe una enmienda presentada por el PP sobre el proyecto de ley del sector eléctrico que me ha puesto los pelos de punta…

La enmienda habilita al ministerio de Industria para que pueda enviar a los domicilios privados a inspectores para que procedan a la revisión de las instalaciones.

Las facultades son increíbles:

“El personal habilitado a tal fin tendrá las siguientes facultades de inspección:

Acceder a cualquier local, instalación, terreno y medio de transporte de las empresas, asociaciones de empresas y personas físicas que desempeñen alguna actividad de las previstas en esta ley, así como al domicilio particular de los empresarios, administradores y otros miembros del personal de las empresas”.

Y solo hará falta una autorización administrativa.

¿Saben cómo llamo yo a esto?:

ALLANAMIENTO DE MORADA

La autorización administrativa parece que no será necesaria si existe consentimiento previo del titular, y ante la negativa a dejar entrar a esta gente, se podrá solicitar la oportuna autorización judicial.

¿Puede ser constitucional una cosa así?

Desde mi punto de vista no lo es, pero ¿quién sabe? Todo se está carcomiendo a nuestro alrededor y apenas nos queda ya espacio para movernos. Los abusos van todos encaminados a dejarnos sin voz.

Si todo eso no fuera suficiente, hay que tener en cuenta que la nueva medida permitirá la incautación de los documentos, además de que se podrán precintar los locales, libros, documentos y otros bienes de las empresas o particulares.

Nos dieron una alternativa para no depender completamente del recibo de luz tradicional, pero eso fue un error estratégico y harán todo lo posible para acabar con lo prometido.

Ramón Cerdá