Plan de Acción de Derechos Humanos – Alberto Brunori

Hoy en la presentación del balance de la fase de alistamiento del Plan de Acción en Derechos Humanos por parte del Gobierno de Colombia, Alberto Brunori, representante de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos en el País, dijo que " las recomendaciones formuladas por parte de los Comités y los mecanismos internacionales de derechos humanos deben ser tenidas en cuenta en la construcción del Plan Nacional de Acción en Derechos Humanos e incluidas en el documento final ".

Brunoritambién señaló que un Plan de Acción en Derechos Humanos " genera ventajas, para el Gobierno y para la sociedad civil, al identificar plenamente los objetivos deseados en cuanto al goce pleno de derechos, establecer los indicadores de avance basados en estándares internacionales de derechos humanos y facilitar el proceso de evaluación y rendición de cuentas".

Al felicitar a la sociedad civil,a través de las plataformas de derechos humanos y de otros sectores sociales nacionales y regionales, por su compromiso, voluntad y acompañamiento al Gobierno para la construcción de este Plan, Brunori subrayó que se " requiere el mayor esfuerzo posible para lograr la mayor participación durante todas sus etapas: diagnóstico, elaboración, ejecución y rendición de cuentas". Además, expresó que el Plan de Acción deberá incorporar la perspectiva de las mujeres, los pueblos afrocolombianos e indígenas y recoger las realidades de todas las regiones del país.

El Representante de ONU Derechos Humanos saludó la disposición del Gobierno de Colombia de cumplir con la obligación contraída en la Conferencia Mundial de Derechos Humanos de Viena de 1993, para contar con un Plan de Acción en Derechos Humanos.

El compromiso de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos con la elaboración del Plan de Acción ha marcado buena parte de su historia desde 1997. En su informe de 1999 la Alta Comisionada recomendó al Gobierno la adopción de un plan de acción para los derechos humanos. Esta recomendación fue reiterada en el año 2001.

Posteriormente, el 20 de junio de 2005, con la facilitación adicional de las Embajadas de España y Suecia, la Oficina convocó a las plataformas de derechos humanos y otros sectores nacionales para presentar una iniciativa que tenía por objeto motivar la construcción de instancias y canales de comunicación para garantizar la fluidez del proceso. Y en el año 2006, por solicitud del gobierno y de las organizaciones sociales apoyó los diálogos para la construcción del Plan Nacional de Acción en Derechos Humanos, suspendido un año más tarde.