Metal supercaliente
Para encender un cohete, el equipo ha desarrollado un sistema en el que un poderoso campo magnético provoca grandes anillos de metal para implosionar en torno a este plasma, comprimiéndolo a un estado de fusión. Los anillos de convergencia se unen para formar una cáscara que enciende la fusión, pero solo por unos pocos microsegundos. A pesar de que el tiempo de compresión es muy corto, libera suficiente energía para calentar rápidamente e ionizar el combustible. Este metal supercaliente es expulsado fuera de la tobera del cohete a una velocidad muy alta. Este proceso se repite más o menos cada minuto, propulsando la nave espacial. «Esperamos poder interesar a todo el mundo con el hecho de que la fusión no está a 40 años de distancia y ni a un coste de 2.000 millones de dólares», señala Slough. Ahora, el equipo está trabajando para ponerlo todo junto utilizando la tecnología para comprimir el plasma y crear fusión nuclear. Slough espera tener todo listo para la primera prueba a finales del verano. En un viaje real al espacio, los científicos utilizarían litio metálico para alimentar el cohete. El litio es muy reactivo, y para realizar pruebas de laboratorio, el aluminio funciona igual de bien, según explican. La fusión nuclear puede parecer arriesgado debido a su uso en bombas nucleares, pero su empleo en este escenario es muy diferente. La energía de fusión para la alimentación de un cohete se reduciría por un factor de 1.000 millones de una bomba de hidrógeno, demasiado poco como para crear una explosión significativa. Además, el concepto de Slough utiliza un campo magnético fuerte para contener el combustible de la fusión y guiarlo con seguridad lejos de la nave y los pasajeros en su interior. De momento, tan solo es una propuesta, pero quizás estos científicos hayan dado con la fórmula para llevarnos mucho más lejos que la Luna.Fuente: abc ZONA-CIENCIA