Hace unos cuantos años se empezó a poner de moda en las bodas unas tímidas barras de dulces, con chucherías variadas, algunos chocolates, pequeñas cupcakes… A día de hoy no es raro encontrar a parejas que buscan un rincón dulce para su gran día, que no solo cuente con chucherías sino con verdaderas obras de repostería. Es decir, dar la posibilidad a nuestros invitados de degustar diferentes postres, todo en un rincón decorado para la ocasión y cuidado al máximo. Además, puedes añadir frutas frescas o zumos naturales: dará un toque aún más colorido y especial.
Ten en cuenta para la preparación:
- El lugar donde planeas ponerla: que sea accesible, no tenga sol directo y tenga espacio para todos los platos que tenéis pensados.
- Vuestros dulces favoritos: unid tradiciones (imagina dulces típicos de vuestras ciudades de origen, por ejemplo, y verás el juego que pueden dar en este tipo de mesas), os podéis sorprender de la variedad que encontraréis con simples productos de vuestra tierra.
- Las frutas de temporada que puedes incluir.
- Los materiales para servir y comer: desde platos a servilletas y cubertería o paletas para servir, ¡no olvides estos detalles!
Si has pensado en tener algo así en tu boda, no te pierdas nuestra entrada de hoy, donde hemos buscado ideas diferentes para dar en el clavo en tu día B, ¡y sorprender de una manera muy dulce!
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