En verano quisiéramos comernos el mundo. Apretamos nuestras agendas y las exprimimos al máximo como si no hubiera mañana. Queremos comernos la luz, el buen tiempo, el sol, la brisa de la playa, el fresquito de la noche, el tacto de la arena en los pies, aspirar el olor de los pinos en la montaña, sentirnos libres en el río, en el mar, en un lago, volar lejos y desconectar, dormir al raso y vivir, vivir todo y más porque el verano nos llena, nos carga las pilas, nos da energía y nos hace sonreír.
Mi wish list de este veranoCenar al aire libre. Adoro las terrazas de la ciudad. Son preciosas. Hay que exprimirlas. ¿Cuántos edificios hay que no dan ningún uso a sus terrazas? ¡Hay que explotarlas!
Picnic en el parque. El Retiro, La Ciutadella... Soy consciente del calor que hace, pero cuando cae un poquito la tarde, es ideal planear una tarde-noche de picnic con amigos.
Picnic nocturno en la playa. Un buen cesto de picnic, con comida rica (diferentes tipo de queso, pasta fresca con espinacas y ricotta, jamón rico, pan con tomate... ¡qué hambre!), una botella de vino y una buena manta para sentarte cómodamente. Plan ideal. Romántico o con amigos, todo vale.
Sesión de cine al aire libre. En Barcelona se proyectan películas durante todo el mes de julio en el Castell de Montjuic pero en muchos lugares de la Costa Brava también (me acuerdo de esas sesiones míticas de cuando era pequeña, con todos mis primos) y estoy segura que en muchas otras ciudades existe esta actividad.
Vermut y remojón en la playa. Me encanta la zona de la Costa del Garraf y esas casetas tipo "circo". Un lugar bastante tranquilo, si tienes suerte. Quizá he ido en días algo "raros" y he disfrutado de una playa casi para nosotros pero el lugar enamora. Hay un único chiringuito en lo alto de las rocas, estratégicamente colocado para que el aire pase y refresque lo justo y necesario en los días más calurosos.
Escaparse a una cala escondida. A veces hay que caminar y caminar. Las cosas bonitas y especiales, no vienen a por ti y no están siempre a tiro de piedra, pero... el esfuerzo, suele valer la pena. En mi caso, sí que es requisito para disfrutar del momento, arena y algo de sombra (o cargar con una sombrilla). No soy mucho de sol y me canso rápido pero si no es una cala de rocas y puedo combinar sol y sombra... estupendo.
Estos y muchos planes más revolotean por mi cabeza pero por ahora... ¡creo que basta! Ahora toca, ¡ir a por ellos! ¡Disfrutar!