Revista Mundo vegetal
Aunque los esquejes de rosas arraigan a lo largo de todo el año si las temperaturas no son extremas, por tradición, el otoño ha sido la época en la que más se han plantado.
Tengo varios métodos para enraizar. Voy a mostrar uno de los que más utilizo, el de bandeja de alveolos.
Cada alveolo tiene ocho centímetros de lado y 12 centímetros de profundidad, es decir, proporcionalmente más profundos que anchos. Son los que se usan para plantar los pinos de repoblación forestal. Es un tamaño óptimo también para los rosales, ya que les permite un desarrollo radicular excelente, y aguantan unos seis meses en buen estado, una vez arraigados.
Llenamos con sustrato la bandeja. Sobre el sustrato a emplear, ya sabéis que podríamos escribir un tratado, que cada experto tiene su opinión, y que casi ninguna coincide. En lo personal, no me rompo mucho la cabeza, porque he llegado a la conclusión de que los cultivares que arraigan, lo hacen en cualquier medio o con cualquier sistema. Los cultivares con dificultad de arraigo es mejor injertarlos, porque no echarán raíces ni cantándoles nanas :).
Empleo un sustrato de porosidad media, que no sea excesivamente ligero o pesado, que retenga la humedad pero que no encharque. En este caso, es el de Flower, que incorpora perlita para un mejor drenaje y un producto que ayuda al desarrollo radicular.
Regamos con cuidado cada alveolo, hasta que sale agua por el agujero de drenaje:
Preparamos las estaquillas. Muestro en la foto una rama del musk Sally Holmes (Holmes, 1976), en el momento ideal para el esquejado: cuando la flor se está marchitando. La rama mide unos 60-65 centímetros:
Se deben elegir ramas sanas, del año en curso y que hayan florecido. Retiramos las flores y las hojas, y cortamos estaquillas que tengan un mínimo de tres yemas cada una, pueden ser más, pero nunca menos, porque arraigan peor:
Hay roseros que dejan alguna de las hojas. Yo no lo hago, retiro todo menos algún trocito de pedúnculo.
Hay roseros que añaden hormonas de enraizamiento. Otros son radicalmente opuestos a su uso. Como los sustratos que empleo tienen una sustancia que favorece el desarrollo radicular (tipo Agrosil), nunca uso hormonas, ni soy fan ni antifán de ellas. Así como noto la diferencia entre usar o no Agrosil cuando planto algo, no la noto cuando uso hormonas. Es la realidad de mi praxis jardineril, sin menoscabo de la experiencia de otros.
Introducimos las estaquillas en los alveolos, presionamos bien alrededor, y volvemos a regar ligeramente para que la tierra se pegue a la madera:
Dejamos la bandeja a la sombra, en un lugar luminoso. De vez en cuando, revisamos, para que no pierda humedad. En unas semanas, emitirán raíces, y en la próxima primavera, muchos de estos esquejes echarán sus primeras flores.
Una de las grandes ventajas de la plantación en alveolos, es que podemos retirar los esquejes y plantarlos en su lugar definitivo sin dañar las raíces. Es un método que me agrada especialmente para los musk, los rosales ingleses, los híbridos de té y los floribunda.
"Una rosa es una rosa es una rosa". Gertrude Stein.