Plataformas, sistemas y líneas

Mariadela Villanueva

Un día cualquiera… – Aló. ¿Hablo con la señora Mariadela? Soy el gerente del banco A, la estoy llamando para verificar si usted emitió el cheque xxx… – ¿El gerente? Que honor, supongo que se debe a que no suelo emitir cheques. Sí, es mío. Tuve que pasar el dinero que tenía con ustedes al banco B para poder hacer transferencias. Tengo días intentando registrarme en la nueva plataforma y nada. He ido dos veces al banco a pedir auxilio pero las muchachas me han indicado que debo seguir insistiendo pues sólo puede hacerse en línea. – Véngase ahora mismo, a ver qué podemos hacer… Después de varias “colgadas” del sistema y casi una hora de placentera conversación, el paciente y servicial camarada gerente logró crear mi usuario en la nueva plataforma. – Muchísimas gracias. Ya que estoy aquí voy a sacar algo de plata. – Hoy no hay, pero mañana se le puede dar hasta 30.000. Un rato después en el Banco C – ¿Y este gentío? – Se cayó la línea hace como una hora y no ha vuelto… – Gracias. Voy a tratar en el que queda en… Rumbo a la otra sucursal – ¿Qué haces por aquí? – Voy a ver si puedo sacar 30.000 que me quedaron de la pensión porque no tengo ni medio en efectivo… – Te acompaño yo saqué ahí en la esquina – ¿Quién es el último? – Yo, pero se acaba de caer la línea y hay como 50 personas allá adentro… mejor me voy – Nosotras también – Por cierto, ¿tienes cuenta en Banesco? La renovación del pasaporte sólo se puede pagar con débito o crédito de ese banco… – No tengo cuenta pero sí una tarjeta de crédito que puedes usar si lo aceptan – Qué bueno, son 90.000. Te puedo dar de una vez 30.000 en efectivo y lo demás lo deposito en la tarjeta. En la nochecita – ¿Cómo está, vecina? – …acaban de sacar leche en la panadería pero no la pude comprar porque no pasó la tarjeta. – Yo me traje dos garrafas, te puedo dejar una. – Un millón de gracias. Si esperas hasta el martes, te la pago en efectivo. – Perfecto Este no es más que un ejemplo de algunas de las “incomodidades” producto de la generalización del uso de tecnología digital sin disponer de la base adecuada. Mi día, como en el cuento oriental “Bueno o Malo, Quién Sabe”, tuvo un final feliz. El gerente me resolvió el problema y conseguí efectivo por los caminos verdes, pero no siempre se tiene la misma suerte. Hay saboteo, sí. Pero también hay carencia de un enfoque integral y de coordinación interinstitucional. La infraestructura necesaria para soportar la masificación de herramientas digitales – telefonía celular e internet; nuevas plataformas y sistemas interactivos; “modernización” de páginas web; actividades audio visuales, lúdicas, artísticas, especulativas, robotizadas, de seguridad, bélicas, etc. – no se improvisa ni se produce o instala de la noche a la mañana. Menos aun estando cercados, sin acceso “por ahora” a conocimientos y componentes importados. Analista y comunicadora. Socialista y chavista. Firme creyente del poder popular   mariadelav@gmail.com       @mariadvillanuev Anuncios &b; &b;