Revista Europa
Después de cuatroaños de trabajos de restauración, desde abril de 2011 la Villa romana estáabierta al público. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, estasuntuosa residencia fue construida entre los siglos III y IV d.C.Con unasuperficie de 3.500 metros cuadrados, la “Villa romana del Casale” de PlazaArmerina, provincia de Enna, es uno de los testimonios más importantes que lacivilización romana ha dejado en Sicilia.Fue residencia decaza, tal vez del emperador Valerio Massimiano (llamado Herculeos Victor),quien junto con Diocleciano dirigían el Sacro Imperio Romano. Los mosaicosfueron realizados, muy probablemente, por africanos. A través de estos mosaicosse puede recorrer la historia del imperio con escenas de la vida cotidiana, larepresentación de los héroes y las divinidades, escenas de caza y de juegos. Enépoca medieval la villa fue cubierta por un aluvión de fango y desaparecida dela memoria colectiva hasta las primeras excavaciones de Paolo Orsi en 1929. Inicios de los trabajos de restauraciónDel proyectoinicial de recuperación de 1950 se debieron replantear algunas soluciones, yaque los materiales y la tecnología de nuestros días han evolucionadoenormemente. En los años ’60, con la euforia del descubrimiento del plástico,la Villa del Casale fue protegida de la erosión de los agentes atmosféricos conestructuras de hierro y techos de plástico. Con el pasar del tiempo se vio quede esta manera se opacaban y debilitaban los mosaicos. Se sustituyeron lospaneles plásticos por vidrio y la Villa se transformó en un gran “vivero”; elcalor y la luz excesiva, además de hacer el aire irrespirable, favorecían lagerminación de plantas, hongos y algas y afloraban las sales que emblanquecíanlos mosaicos. Algunos trabajos con ceras y barnices transparentes, impedían alterreno respirar, provocando una acumulación de humedad y explosiones de“globos” que fracturaban las uniones de los mosaicos.
La restauración de los últimos añosLa “misiónimposible” de los restauradores de los últimos años consistió en remover de lasuperficie los estratos de limo no aún eliminados totalmente (desde elaluvión), repulir los mosaicos dañados por materiales agresivos, aplanar los“globos”, embeber el terreno con infiltraciones de sales y minerales y reconstruirlos motivos ornamentales.Gracias a lasciencias modernas, regresarán antiguas plantas, cuyo polen había sido aisladodurante anteriores excavaciones arqueológicas. Un experimento de arqueobotánicaque devolverá entre el verde de la Villa del Casale, flores de colores,inflorescencias y arbustos “transportados” del pasado.