Pleno de ridículo

Redacto esta entrada cuando apenas hace un rato que ha finalizado el Pleno ordinario del Ayuntamiento de Ibi correspondiente al mes de diciembre. La verdad es que cuesta decidir por dónde empezar a contar lo ocurrido, así que lo haré desde el principio. Por cierto, que antes de nada, la Alcaldesa volvió a recordar "su" prohibición de grabar los Plenos.
Sin apenas debate se han aprobado los primeros puntos del orden del día: la instalación de un centro de almacenamiento y distribución de gasóleos de automoción en C/ Zamora, la lista de personas y entidades que recibirá un reconocimiento a su labor en el acto institucional del día 6 de enero de 2011 y la rotulación de los nuevos viales (de estos dos temas ya hablé hace unos días).
Incluso en el punto 5º ha habido consenso, pues todos los grupos hemos decidido leer un manifiesto conjunto de indignación ante la vulneración de los derechos humanos en el Sahara y la represión marroquí. El ambiente ha empezado a tensarse en el debate de la moción del PP sobre la aplicación de un determinado modelo de política industrial y tecnológica de apoyo a los Centros Tecnológicos. Bueno, el debate ha sido ordenado, pero una vez más la Alcaldesa se ha encargado de encender la mecha y disparar su traca final particular (toda la culpa la tiene ZP, es decir, nada nuevo bajo el sol), sin mediar la más mínima provocación.
Pero cuando ha llegado la parte de control a los órganos de la Corporación, los tres portavoces de los grupos de la oposición hemos presentado una Moción por Vía de Urgencia a favor de la TRANSPARENCIA en la gestión municipal. En la Moción, firmada por todos los concejales de la oposición, se solicitaba un decálogo de medidas con las que responder a la preocupación ciudadana derivada de las últimas noticias aparecidas en prensa (aquí, aquí o aquí).
Creo que los tres portavoces hemos sido bastante elocuentes a la hora de justificar la urgencia de nuestra Moción, hasta el punto de que la Alcaldesa nos pidió por favor que le dejásemos unos minutos de receso para hablar con sus compañeros de grupo. El receso se prolongó por más de 30 minutos, pero al regresar la Alcaldesa nos dijo que no iban a votar la urgencia, es decir, que consideran que el tema NO es urgente y no iban a permitir que en ese Pleno de hablase de esas medidas y de esa transparencia, decisión recibida con sonoros abucheos por parte del público que llenaba totalmente el Salón de Plenos.

El ambiente se volvió a tensar en la parte final, en Ruegos y Preguntas, cuando la Alcaldesa ha ordenado a la Policía Local que expulsase del Salón de Plenos a una persona que estaba grabando con una cámara digital. La reacción de gran parte del público asistente y de los Concejales del Grupo Socialista fue inmediata: se levantaron y se marcharon del Pleno.
Faltaba muy poco para terminar, pero a los que nos quedamos sentados en nuestra silla todavía nos quedaba aguantar el auténtico tostón que supone escuchar a Mayte Parra desbarrar de Antonio Martos como una energúmena.
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