Podemos pero no quiere

Mucho criticar a Podemos, mucho poner el miedo en el cuerpo augurando que esto acabará como Venezuela, mucho hablar de populismo, pero ni un solo partido político a nivel colectivo o individual, salvo aparentarlo de mala manera, está haciendo absolutamente nada para dar solución a los muchos problemas sistémicos, acabar con la corrupción y la dictadura oligárquica y establecer la Democracia y el Estado de Derecho en España de una vez por todas.

Dicen que una de las características de los habitantes de la ribera del Mediterráneo es la imaginación, pero nuestros políticos, en especial los de PP y PSOE, demuestran tener muy poca porque frente a retos como los de Podemos solo saben aplicar la política del miedo, el insulto y el par de hostias, a pesar de haber fracasado ya estrepitosamente frente al independentismo catalán, al que este tipo de política en vez de parar su expansión la incentivaron.

La cifra del dinero que debía dedicarse a luchar contra el paro y a mejorar la formación de los parados, pero que ha desaparecido sin dejar rastro en Andalucía ya sobrepasa los 5.000 millones, aunque se podría decir que al menos está repartido porque los imputados son varios cientos. Entre los imputados hay dos ex-presidentes de la CCAA, Chaves y Griñán y, al menos por el momento su partido, el PSOE, no les ha exigido la renuncia a todos sus cargos actuales, cuando teniendo en cuenta el volumen y la extensión del robo, deberían renunciar aunque no estuviesen imputados porque detentaban la máxima responsabilidad de la CCAA cuando se produjeron los robos, y si están implicados es grave, pero no lo es menos si ni tan solo se enteraron. Encima, quien más les critica es el PP que en cuanto a corrupción está a un nivel similar o peor todavía, quizás no en cuanto a la cifra total, pero si al número y localización geográfica de los escándalos, ha actuado con un cinismo de vergüenza ajena para desentenderse de cualquier responsabilidad y además hace décadas que usan a su antojo la Justicia y practican el método de tergiversar, manipular, manosear, y apropiarse de las leyes y la Justicia hasta conseguir que con demasiada frecuencia estas se apliquen en función de lo que interesa en cada caso.

Nadie está haciendo una sola propuesta honesta y eficaz para luchar contra la corrupción, y lo que proponen en temas como transparencia y medidas de partido contra los implicados en asuntos de corrupción daría risa si fuese un chiste.

En cambio la política del miedo, el insulto y el par de hostias goza de muy buena salud, a pesar de que siempre empeora las cosas en vez de solucionarlas, y a ello se ha dedicado una vez más el ministro Montoro que acaba de manifestar alto y claro en el Parlamento que si la Generalitat catalana no perdiese el tiempo con el soberanismo, Catalunya tendría un mayor crecimiento económico y sería uno de los motores que con más fuerza contribuiría a la salida de la crisis económica, pero resulta que el mismo día en que soltaba la cotidiana burrada se publicaban las cifras del comercio exterior con el resultado que un tercio del aumento del 2,5% de las exportaciones españolas en 2014 corresponden a Catalunya, que ya sobrepasa el 25% de todas las exportaciones españolas con más del doble que el porcentaje de la CCAA que viene a continuación que es Madrid con el 11%. Lo que ocurre es que algunos malintencionados ciudadanos, entre los que me encuentro, no comprenden el claro mensaje de nuestro honesto gobierno: las cifras son lo de menos, las exportaciones no sirven para nada, por más que las denostadas embajadas catalanas contribuyan a que sus exportaciones sean de muy largo las que más han crecido en los años difíciles, todo eso es inútil porque si el país está saliendo de la crisis en medio de un festival de fuegos artificiales es única y exclusivamente gracias a la extraordinaria gestión del presidente Rajoy y sus muchachos del PP.

Por cierto, Françesc Cabana, cuñado de Jordi Pujol compareció el lunes 16 frente a la comisión sobre el fraude del Parlament de Catalunya, y después de su intervención todavía estoy más seguro de lo que he afirmado varias veces: que aunque no lo puedo demostrar, estoy convencido que el capital que Jordi Pujol tiene en bancos extranjeros salió de Banca Catalana. El cuñado negó cualquier depósito en Suiza o Andorra incluido en la herencia de Pujol padre, además, como que fue su vicepresidente ejecutivo, lo atribuyó a ventas de acciones del banco, y descartó cualquier operación de malversación o expolio de Banca Catalana, que es precisamente lo que yo creo que fue el origen de los depósitos extranjeros de Jordi Pujol.

Esta intervención también confirma una de las razones de que siempre haya tenido mala opinión del personaje: lo rematadamente mal que hace las cosas. Si uno se inventa una herencia para camuflar el origen de un dinero depositado fraudulentamente en el extranjero lo primero que tiene que hacer es ponerse de acuerdo con sus parientes para que todos digan la misma mentira (¿o es la misma verdad?), y si no hay garantías de que va a ser así debe buscarse otro camuflaje alternativo.