Los primos sin duda alguna son esos 2dos hermanos necesarios que toda persona necesita y que quiere como si se tratara de un verdadero hermano por así decirlo. Si tienes un primo o prima que quieres mucho y deseas demostrarle ese afecto que no puedes hacerlo con demostraciones un poema te vendrá como anillo al dedo y eso lo que te ofrecemos en este artículo; poemas dedicados a Primos.
Estos poemas pueden ser utilizado tanto para primas como para primos pues no están definidos por género y esto quiere decir que podrás aplicarlo a chicas y a chicos sin la necesidad de modificarlos ni nada.
Personalmente prefiero entregar un poema en mano imprimiéndolo que enviándolo por email, esto permite que el sentimiento entregado tenga una mayor carga y que además el poema se reciba de mejor forma. De igual manera lo mejor es leer el poema a ese primo o prima al cual le queremos entregar el poema, pues recitar un poema es mucho mejor que entregar un papel solo con letras.
Sin mucho más que agregar, a continuación te dejamos 3 poemas dedicados a primos, poemas simples de leer y con muchísimo sentimiento en sus palabras.
Poemas para primos:
Creo en tí Amigo
Creo en tí amigo:
Si tu sonrisa es como un rayo de luz
que alegra mi existencia.
Creo en ti amigo:
Si tus ojos brillan de alegría al encontrarnos.
Creo en ti amigo:
Si compartes mis lágrimas y
sabes llorar con los que lloran.
Creo en ti amigo:
Si tu mano está abierta para dar y
tu voluntad es generosa para ayudar.
Creo en ti amigo:
Si tus palabras son sinceras y
expresan lo que siente tu corazón.
Creo en ti amigo:
Si sabes comprender bondadosamente mis debilidades y
me defiendes cuando me calumnian.
Creo en ti amigo:
Si tienes valor para corregirme amablemente.
Creo en ti amigo:
Si sabes orar por mí,
y brindarme buen ejemplo.
Creo en ti amigo:
Si tu amistad me lleva a amar más a Dios
y a tratar mejor a los demás.
Creo en tí amigo:
Si no te avergüenzas de ser mi amigo
en las horas tristes y amargas.
El árbol de los amigos
Existen personas en nuestras vidas que nos hacen felices
por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino.
Algunas recorren el camino a nuestro lado, viendo muchas lunas pasar,
mas otras apenas vemos entre un paso y otro.
A todas las llamamos amigos y hay muchas clases de ellos.
Tal vez cada hoja de un árbol caracteriza uno de nuestros amigos.
El primero que nace del brote es nuestro amigo papá y nuestra amiga mamá,
que nos muestra lo que es la vida.
Después vienen los amigos hermanos,
con quienes dividimos nuestro espacio para que puedan florecer como nosotros.
Pasamos a conocer a toda la familia de hojas a quienes respetamos y deseamos el bien.
Mas el destino nos presenta a otros amigos,
los cuales no sabíamos que irían a cruzarse en nuestro camino.
A muchos de ellos los denominamos amigos del alma, de corazón.
Son sinceros, son verdaderos.
Saben cuando no estamos bien, saben lo que nos hace feliz.
Y a veces uno de esos amigos del alma estalla en nuestro corazón
y entonces es llamado un amigo enamorado.
Ese da brillo a nuestros ojos, música a nuestros labios, saltos a nuestros pies.
Mas también hay de aquellos amigos por un tiempo,
tal vez unas vacaciones o unos días o unas horas.
Ellos acostumbran a colocar muchas sonrisas en nuestro rostro,
durante el tiempo que estamos cerca.
Hablando de cerca, no podemos olvidar a amigos distantes,
aquellos que están en la punta de las ramas
y que cuando el viento sopla siempre aparecen entre una hoja y otra.
El tiempo pasa, el verano se va, el otoño se aproxima y perdemos algunas de nuestras hojas,
algunas nacen en otro verano y otras permanecen por muchas estaciones.
Pero lo que nos deja más felices es que las que cayeron continúan cerca,
alimentando nuestra raíz con alegría.
Son recuerdos de momentos maravillosos de cuando se cruzaron en nuestro camino.
Te deseo, hoja de mi árbol, paz, amor, salud, suerte y prosperidad.
Simplemente porque cada persona que pasa en nuestra vida es única.
Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros.
Habrá los que se llevarán mucho,
pero no habrán de los que no nos dejarán nada.
Esta es la mayor responsabilidad de nuestra vida
y la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por casualidad.
El valor de un Te Quiero!
Te quiero decir muchas cosas por medio de esta carta
y sinceramente te las mereces…
TU AMISTAD VALE MUCHO!
Te quiero decir que si mañana dejo de existir,
te observaré en el cielo, te cuidaré y, sobre todo,
abogaré por aminorar tu sufrimiento.
Te quiero decir que si dejas este mundo,
Dios no lo quiera, te recordaré y siempre te voy a querer,
cada noche hablaré contigo.
Quiero que sepas que te quiero mucho
y eso es algo muy importante para mí,
ya que hay veces que uno cree
que no es conveniente decirlo por cualquier razón.
Sé que debí decirte antes cuánto te aprecio,
pero si por alguna razón no nos volvemos a ver,
te dejo esta nota para que sepas lo mucho que te quiero.
Y si no alcanzaste a decírmelo y yo dejo de existir,
no te preocupes, que por el simple hecho de nuestra amistad
sabré que me aprecias.
Recuerda que nunca sabemos cuándo dejamos de existir,
por eso quiero decirte hoy con esto
¡Que te aprecio mucho!
publicado el 23 diciembre a las 00:37
mee encanta ayy cosa qu ceres delicales a las persona qu queress yy qu te quieress