Este año se cumple el centenario del nacimiento de uno de los más importantes poetas españoles: Miguel Hernández. Uno de los grandes de la generación poética más grande, la del 27, el más joven.
Nacido en una familia pobre, dedicada a la cría del ganado. Empezó pronto el colegio, y sus buenos resultados en los estudios le consiguieron una beca en las escuelas del Amor de Dios, regentada por jesuitas. Allí destacó por su inteligencia.
Sin embargo, su padre le sacó de la escuela, entendía que lo que necesitaba era un medio de vida y que allí perdía el tiempo. Entonces el adolescente Miguel se convierte en cabrero, aunque ya la semilla cultural le había prendido y se hace con libros y mientras cuida las cabras no cesa de leer a los clásicos, de los que se enamora. Y empieza a escribir poesía. En 1930 logra que le publiquen sus primeros poemas.
En diciembre de 1931, Miguel intuye que es el momento propicio, con los cambios que la República ha traído culturalmente, y decide irse a Madrid. Con sus poemas debajo el brazo, cuatro perras, dos mudas y en alpargatas se presenta en la capital. Este primer viaje a Madrid es un fracaso, aunque le conceden alguna entrevista siempre le toman como algo anecdótico, “el joven poeta cabrero”, pero la falta de estudios, no tener títulos, hace que no se le tome en serio, y vuelve fracasado a Orihuela, a los pocos meses.
Allí con su amigo Ramón Sijé, empieza un nuevo camino. Éste le ayuda a pulir su estilo y junto a otros dos intelectuales consigue formar una tertulia literaria en la Panadería Fenoll, que obtiene cierto éxito en Orihuela.
Su nombre empieza a sonar por la comarca. En 1933 se edita su primer libro Perito en lunas, en honor de Góngora, que se compone de 42 octavas reales:
En 1933 conoce a Josefina Manresa que habría de ser su musa durante toda su vida. Y empieza la relación como no podía ser de otra manera entregándole una poesía. Al año siguiente vuelve a Madrid, ahora con más suerte. Le publican en Cruz y Raya de Bergamín y conoce a Neruda, Alexandre y Alberti entre otros. Comienza su carrera de notable poeta. Y gira hacia una poesía más comprometida. Le contratan en la Misiones pedagógicas, para enseñar al pueblo, precisamente a él que era autodidacta y no tenía estudios. Colabora en la Revista de Occidente.
En 1935 muere su íntimo amigo Ramón Sijé, en Nochebuena, a los veintidós años. A él le compone esta preciosa elegía:
Esta elegía provoco los elogios de Juan Ramón Jiménez. Posteriormente ya en 1936, escribe algunos de sus más bellos poemas y publica con gran éxito El rayo que no cesa:
Un carnívoro cuchillo / de ala dulce y homicida / sostiene un vuelo y un brillo / alrededor de mi vida…
Ese mismo año estalla la guerra y Miguel se alista al quinto regimiento, regimiento compuesto por voluntarios comunistas y de las Juventudes Socialistas Unificadas. Posteriormente el poeta pasa al batallón mandado por El Campesino, donde se incorpora como comisario cultural. Es aquí donde se forja como poeta del pueblo y donde su compromiso se hace más latente. Su creciente actividad y su mala alimentación le provoca una anemia cerebral. Es hospitalizado y allí conoce a Antonio Buero Vallejo.
Más tarde, en Marzo de 1937 vuelve a Orihuela donde se casa con Josefina Manresa. De allí marcha para el frente de Jaén, donde tiene tiempo para escribir este famoso poema
Andaluces de Jaén, / aceituneros altivos, / decidme en el alma: ¿quién, / quién levantó los olivos? / No nos levantó la nada, / ni el dinero, ni el señor…
Mientras tanto, compone obras de teatro que son alegatos por la causa y contra el enemigo, conocido como Teatro de la guerra.
Viendo el rumbo que la guerra está tomando, va decayendo físicamente cuando aparece otra de sus obras cumbres: Viento del pueblo:
Vientos del pueblo me llevan, / vientos del pueblo me arrastran / me esparcen el corazón / y me aventan la garganta. / Los bueyes doblan la fuerte / …
Esta obra, poesías de guerra, es una de las de mayor fuerza y compromiso y tuvo un gran éxito.
En diciembre de 1937 nace su hijo, que pocos meses más tarde muere. Más tarde nace su segundo hijo en 1939, y mientras crea El cancionero y romancero de ausencias:
Con la guerra acabada intenta marcharse a Portugal, pero desde allí le devolvieron a España y le encarcelaron. Josefina le comunica por carta que está pasando hambre, que sólo puede comer pan y cebolla¨:
En septiembre del 39 consigue salir de la cárcel y de nuevo intenta el exilio pero sin éxito, vuelve a Orihuela, y allí le denuncian y entra de nuevo a la cárcel. En el verano de 1940 es condenado a muerte: Condenado por intelectual al servicio de la República, por haberse alistado voluntariamente. Sanchez Mazas, Jose María de Cossío y Luis Almarcha, amigos del bando vencedor, le ayudan y consiguen que le conmuten la pena de muerte por 30 años. En 1941 compone Cancionero y Romancero de ausencias:
La situación de Miguel llega a ser desastrosa, física y psicológicamente, depresivo contrae el tifus y la tuberculosis. Ya viendo el final, se casa por la Iglesia con Josefina con el fin de que su hijo pueda llevar su nombre dignamente. El 28 de marzo de 1942 muere Miguel de su enfermedad.
Nueve años más tarde quisieron darle una beca a su hijo, y Josefina no aceptó porque a cambio quisieron que Viento del pueblo no se publicara en España y en América. Y por encima de todo estaba la memoria dignificada de su amado Miguel y de su obra. Posteriormente el régimen lo invisibilizó, escondiéndole de la cultura oficial, y así permaneció hasta la transición.
Pero, la ignominia no acabó con el régimen franquista. Hace poco, en su Orihuela local, una alcaldesa del partido popular ha subvencionado a un poetastro para que ultraje los poemas de Miguel Hernández, cambiándoles la letra para satirizar a Carrillo, Zapatero,y elogiar a la alcaldesa y a la lideresa Espe.
Durante los primeros cinco días del año de su aniversario, han brotado en la blogosfera, decenas de entradas para homenajear al poeta. Un homenaje que lo dignifica y que le honra. Y lava la mala baba que se respira desde el gobierno municipal de Orihuela. Pero, también, a partir de hoy, florecerán más entradas, homenajes y actos que recordarán a Miguel Hernández, porque somos muchos más, los que consideramos que el poeta del pueblo está más vivo que nunca a pesar de los canallas que le han intentado ultrajar y no han podido. Porque ultraja quien puede, y no quien quiere.
Salud y República
P.D. Estos han sido las entradas y blogs que he podido recopilar con ayuda de Júcaro. Sí ha habido alguno que no hemos detectado, les ruego disculpen, me lo hagan saber y les añadiré:
Alfredo Domínguez, Angels Martínez i Castells, Antonio, Antoine Martí, Antonio Rodríguez, Assur, Benito Páramo El Pinto, Bernardo Ríos, Boletín Informativo, Carlos Navarro, Carmen, Carmen Moreno Martín, Castillos en el Aire, Cruz Díaz, David Ruiz, Dempeus, Dilaida, Eduardo Montagut Contreras, Felipe, Francisco Legaz, Isabel Martínez, Javi, JLM / MJL, Jorge Sánchez, Júcaro, Kutxi, Juan Murillo, Líster, Mamen, María, María Jesús Paradela, Mariano Planells, Miguel Ángel García, Mjesús, Montse Paco Piniella, Paquita, Palmeral, Pilar de la Higuera, Pilar Rego, Ramón Pacheco, Raticulina, Rubén Ferrandiz, Severino, Sota, Sinimey, Trankilo