Ficción y realidad se confunden en esta cinta alemana que puede desorientarnos al principio pero que con el paso de los minutos consigue introducirnos en su particular y fascinante universo. Si bien la trama de un videojuego que aísla las personas del mundo real nos puede resultar familiar, poco tiene que ver con nada que hayamos visto antes debido a su plasticidad visual colorida y gris a la vez, e incluso por una historia con un mensaje ácido lleno de crítica social. Quizá penséis que nada tiene sentido al ver esta película, pero si aguantáis hasta la pantalla final comprobaréis que todo encaja, o puede que no...