Polémica simplemente por no aclarar bien una información y así subestimar

Diario La Nación

El lunes a las 14.07, La Nación Line difundió el título La TV Pública ignoró los incidentes en River. Ese día, el periodista Alfredo Leuco había dicho lo mismo con su nota La libertad de prensa se fue al descenso. Esa misma noche, el programa kirchnerista 6,7,8 se la pasó hablando mal de esa noticia, por supuesto, desmintiéndola. El periodista Alejandro Apo brindó su testimonio: dijo que estaba en San Juan apunto de relatar San Martín vs Gimnasia (LP) y que se enteró de los incidentes por medio del Canal 7 K.
Y la verdad fue que la TV Pública informó sobre los incidentes, pero desde adentro del Monumental y sin preocuparse de lo que sucedía en sus alrededores, donde estaba el escenario más grave. Según Leuco hubo una orden para que las cámaras de la TV estatal no se metiera en la zona roja de los disturbios.
¿Qué hice yo? Estuve muy enganchado con el 7 porteño hasta los primeros diez minutos de los incidentes, porque tenía la esperanza de que el partido podía finalizar. No fue así. Luego se me pasó por la cabeza que el resto de los canales podían estar informando mejor. Pasé a América, luego a Telefé y de ahí no volví más al 7.
Concretamente, la TV pública sí lo informó, pero lo hizo mal e incompleto. Le faltó ese plus de calidad periodística que consiste en buscar la noticia en el lugar donde ocurre. Camarógrafos y periodistas de Telefé, El Trece, TN, América y Crónica sí lo hicieron y hasta arriesgaron sus vidas. Ellos trabajaron mejor. Hicieron mejor periodismo. Y eso es lo que le llega a la gente.

Diario La Nación

Para mi el verdadero debate no es si la TV Pública o la prensa K evitó informar los incidentes (porque Alejandro Apo tiene razón al decir que sí se informó). En todo caso, la clave está en comprobar que el periodismo K no se arriesga en mostrar toda la realidad, en llegar al corazón de la noticia.
Concretamente se comprobó que es un periodismo de mala calidad: eso es lo más importante a tener en cuenta de aquí en adelante. Y lo mismo sucede en Cuba, Venezuela y Ecuador, donde los gobiernos respectivos ponen piedras en el camino a la prensa libre, que termina siendo la que se arriesga a decirlo todo.
En lo personal, yo me sentí subestimado cuando La Nación expresó que no se informaron los incidentes (o mejor dicho, cuando no aclaró bien que se estaba informando desde adentro de la cancha) y también cuando vi a los panelistas de 6,7,8 haciéndoles creer a la gente que ellos mostraron realmente todo.Apuntes de periodismo digital