Hace un par de meses les enseñé un vestido de Mango que había comprado en una oferta online. Me gustaba mucho la tela con blusa de estampado muy finita y falda elástica, pero por precaución me pedí una "M" y me quedaba holgada de pecho y cintura, por lo que al probármelo me decepcionó un poquito.Afortunadamente, probé a combinarlo con un cinturón ancho y elástico que tenía por casa y me he quedado contentísima con el resultado, así que hoy os lo enseño con un look y manicura a juego, como me gusta a mí ;)
1. El vestido.
Si lo ven arriba, se nota perfectamente cómo es más ancho por la parte superior que por la inferior lo cual da lugar al problema que les comentaba. Utilizando el cinturón he conseguido que me favorezca (sin él parezco un "saco de papas" jajaj!) y la blusita queda ancha y muy mona - tampoco es que quisiera yo parecer una morcilla de Burgos, no sé si me explico). Les dejo con las fotos, que se explican mejor que yo ;)
Les enseño un "Aaaarg" en toda regla: como me bronceo con salir a la calle y lógicamente me ha dado más el sol en la parte superior del cuerpo...¡¡miren qué diferencia tan horrorosa entre brazos y piernas luzco aún!! (jajaja)....
2. El maquillaje.
Tan contenta por poder lucir mi vestido - aaaargs aparte - decidí comenzar por un maquillaje que combinase con los tonos de mi vestido, pero que tuviese un aire veraniego. El vestido tiene tonos azul marino, púrpura y morado y creo que un maquillaje que no tuviese un aire un poco juvenil - tirando más de rosados - podría darme un aspecto "serio" y echarme años (vade retro!). Así que os cuento ahora los tonos que elegí, algo más claros que los del traje, pero en su línea.
Partiendo de esta idea, vi que la "ultramatts vol. II" de Sleek tenía los tonos perfectos para mi propuesta. Comencé iluminando el lagrimal con un tono blanco y marcando la cuenca con el morado más oscuro de la paleta.
Entre ambos tonos tenemos un tono piel de Martora y, finalmente, para integrarlo todo,un fucsia en el último tercio del párpado móvil.
Para suavizar un poco el delineado y seguir jugando con los tonos del vestido, en lugar de utilizar un tono de perfilado en negro recurrí a un gris acero/azulón de la marca Zoeva, en formato líquido.
A ras de pestañas inferiores tenemos de nuevo un tono azul metálico, en este caso de mano de Bourjois y un toque de beige en el lagrimal para abrir la mirada. Pienso que esto, junto con la máscara aplicada con mimo y detalle (L'oreal), da lugar a una mirada abierta y favorecedora.
Para el resto del maquillaje utilicé mi base y polvos habituales de estos meses además de un toque de broncer de Deborah e iluminador, en esta ocasión de la mano de Benefit y rubor de Essence; es de la EL Beauty Beats, un fucsia bastante oscuro que combina muy bien con este tipo de tonos. El labial es de MAC y lo veíamos en mis favoritos de verano hace muy poco: se llama "All's fair" y me encanta lo favorecedor que es, entre fucsia y morado sin resultar otoñal (aunque lamentablemente es de una EL).
Les dejo una última imagen y finalmente, el "photocall" de productos usados :)
3. La manicura.
¡Ya saben que cuando tengo tiempo me encanta combinarlo todo! Y en esta ocasión, como llevaba las uñas rosa claro, decidí darle unos toques de tonos más subidos en anular y pulgar para combinarla con el vestido. Simplemente he hecho una "francesa al bies" (me acabo de inventar un término de manicuras, me temo) con un tono rosa oscuro y otro, justo al contario, con glitter.
Además, decoré las uñas con unas pequeñas cuentecitas en forma de lágrima que le dan a la manicura un aire "hindú", ¿no creen?
Les dejo los esmaltes y la ruedecita...
Y se acabó, que ya es bastante.
¿Tiran de cinturones para conseguir acabados más favorecedores en sus looks?
En este caso, fue todo un acierto.
Espero que les haya entretenido :)
BESOS!